El primer ministro de Perú responde al defensor del pueblo que los DD.HH. "no se redefinen"

Lima, 21 may (EFE).- El primer ministro de Perú, Alberto Otárola, afirmó que "los derechos humanos no se redefinen", después de que el pasado viernes el nuevo defensor del pueblo, Josué Gutiérrez, pidiera a la presidenta Dina Boluarte que "redefina el rumbo de los derechos humanos".

"Le pediré al señor doctor Gutiérrez que nos explique qué ha querido decir con esa frase. Los derechos humanos, en primer lugar, no se redefinen, son derechos que están en la parte dogmática de la Constitución y que es obligación de todos respetarlos, incluido el defensor del pueblo", señaló Otárola en declaraciones publicadas este domingo por medios locales.

El primer ministro insistió en que esos derechos hay que "respetarlos y ponerlos por encima de cualquier consideración política".

Otárola consideró que Gutiérrez, quien juró el viernes como nuevo defensor, "podría fijarse un poco más en los derechos de la Policía, de los familiares, de las Fuerzas Armadas".

"Ser un poco más imaginativo en la idea de consolidar el contenido esencial de los derechos fundamentales de toda la población y sobre todo ver qué cosa significa entrar de lleno al derecho a la protesta, que es un tema que ha convocado inclusive un pronunciamiento de la Corte Suprema y que requiere una reflexión de nuestras más altas autoridades", dijo.

Gutiérrez, un abogado y exparlamentario izquierdista, juró al cargo ante el presidente del Congreso, José Williams, tras haber sido elegido el pasado miércoles por el pleno con el apoyo decisivo de la bancada del partido fujimorista Fuerza Popular, además de legisladores de todo el espectro político, con excepción de la extrema derecha.

En los últimos días, políticos de diferentes tendencias habían cuestionado que Gutiérrez haya sido abogado de Vladimir Cerrón, el líder del partido marxista Perú Libre, con el que el expresidente Pedro Castillo (2021-2022) ganó las elecciones de 2021.

El abogado, de 51 años, también fue elegido congresista en 2011 por la alianza izquierdista Gana Perú, que llevó a la presidencia peruana a Ollanta Humala (2011-2016).

Tras jurar el cargo, el nuevo defensor del pueblo hizo "un llamado a la presidenta constitucional de la República, que redefina el rumbo de los derechos humanos", tras lo cual dijo que en su país "no habrá paz jamás cuando hay una brecha social muy grande".

Añadió que iniciará "todo un proceso" que permita afrontar las "reales necesidades" de los ciudadanos y que el organismo "tiene que ser independiente de cualquier ideología, porque los derechos humanos están por encima".

"La Defensoría no puede ser tienda de un partido político, defiende a la población indistintamente de su procedencia", dijo.

(c) Agencia EFE