México necesita jugadores en Europa o estará condenado a la mediocridad

México perdió un partido más ante EEUU y no se ve para cuándo pueda cambiar esto. (Omar Vega/Getty Images)
México perdió un partido más ante EEUU y no se ve para cuándo pueda cambiar esto. (Omar Vega/Getty Images)

La búsqueda de explicaciones no para. México quiere encontrar los motivos que le han llevado a ser tan marcadamente inferior en relación con Estados Unidos, que volvió a vencerles y les ganó otra Nations League más (son tricampeones). El clima de tensión ha acelerado todos los ánimos. Hablan jugadores activos y exjugadores; opinan directivos y entrenadores. Los puntos de vista abundan, pero la desesperación no cesa: la carrera ha dejado de ser pareja. Y, en gran medida, eso se explica por los jugadores que tiene el rival, los cuales juegan, casi todos, en Europa.

México, en su plantel titular del domingo, alineó sólo a seis jugadores que militan en Europa: Jorge Sánchez (Porto), César Montes (Almería), Johan Vásquez (Génova), Luis Chávez (Dinamo Moscú), Edson Álvarez (West Ham) e Hirving Lozano (PSV). El once de Estados Unidos estuvo conformado en su totalidad por jugadores que están en Europa. Incluso con las entradas de Santiago Giménez y Orbelín Pinada, que también juegan en Europa, la balanza se inclina para los vecinos del Norte y por amplia diferencia.

En la lista oficial de 23 convocados para estos partidos que presentó Gregg Berhalter sólo dos elementos no juegan en Europa: Drake Callender y Miles Robinson. La hegemonía que durante cinco años ha desarrollado Estados Unidos sobre México se explica a través del nivel al que están expuestos sus futbolistas todos los días en sus clubes.

Y al menos Jaime Lozano tiene claro por qué sucede esto: el diagnóstico del entrenador nacional es certero. “Creo que tener jugadores en los mejores ligas, eso te da otros contextos, competencia a nivel internacional. Es formar mejor y vender a edades tempranas, es lo mejor que nos puede pasar, en este caso a mí como seleccionador, pero a toda la selección”, dijo el timonel en conferencia de prensa.

Pero esa valoración no fue compartida por Alberto García Aspe, capitán mexicano en las Copas del Mundo de 1994 y 1998. El Beto recordó que en su época se lograron mejores resultados y eso que la mayoría de jugadores competían en el futbol mexicano. "¿Cuántas Copas América jugamos? El 95% de los jugadores estábamos en México. Había dos en Europa, llegamos a la final, así que no vengan con estupideces de que tienen que estar allá en Europa", dijo en Caliente TV.

Y fue enfático en la fórmula que debería seguirse para alcanzar el mejor nivel posible: "Ojalá muchos se vayan a Europa, pero para eso tenemos que trabajar aquí. Hoy las fuerzas básicas son una porquería, no hay ascenso, no hay descenso", expresó. Es cierto que México debe mejorar a nivel formativo y así tener jugadores más completos incluso antes de pensar en la exportación. Ese es el primer paso que debería atenderse para tener mejores jugadores.

Pero también sería erróneo promover la idea de que se puede competir ante grandes selecciones, o en un nivel de élite, sin tener jugadores en Europa y sólo con los del futbol local. Estados Unidos los tiene y supera a México. Las grandes selecciones del Mundo, aunque puedan tener un par de jugadores en ligas "raras", sustentan su base con elementos que juegan en Europa y en los mejores clubes. El futbol de hoy no es el mismo al de esa época que cita García Aspe.

Sí, su generación logró mejores cosas que la actual, pero el futbol demanda un máximo nivel para estar a la altura y ese máximo nivel sólo se encuentra en el Viejo Continente. Tener jugadores ahí no garantiza nada. Pero no tenerlos sí garantiza el fracaso. Y ya se está comprobando de manera cruda y constante para el Tri.

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