Mayorkas, a juicio político, ¿qué sigue?

WASHINGTON — El martes, los miembros republicanos de la Cámara de Representantes aprobó llevar a juicio político por mayoría simple al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas. Esto desencadena una serie de rituales coreografiados que se remontan al juicio político contra el expresidente Andrew Johnson en 1868. He aquí un vistazo a lo que sucederá a continuación.

Una procesión ceremonial

Una vez que la cámara apruebe dos artículos de destitución que describen las acusaciones en contra de Mayorkas como parte de sus responsabilidades de supervisión e investigación, se trasladan al Senado.

El día después de que Johnson fue destituido, en febrero de 1868, el representante republicano de Pensilvania Thaddeus Stevens estaba tan enfermó cuando se entregaron los artículos de destitución que fue necesario cargarlo para llevarlo al Capitolio.

Después de la recepción de los artículos, el Senado, que funge como una Corte Suprema de Destitución, programa un juicio político en el que los senadores sopesan la evidencia, escuchan a los testigos y, en última instancia, votan para absolver o condenar. También podrían votar que se desestimen los cargos.

El juicio en el Senado

El presidente de la Cámara de Representantes nombra a los gestores del juicio político de la cámara a los que se les encomendará la tarea de defender el caso contra el funcionario sometido al juicio político, por lo que fungen como la parte acusadora en el juicio del Senado.

En el caso de Mayorkas, los artículos de destitución también nombran a 11 gestores del juicio político. Este grupo incluye a los representantes Mark Green de Tennessee, quien preside la Comisión de Seguridad Nacional que presentó los cargos, y la representante republicana de Georgia Marjorie Taylor Greene, quien encabeza al grupo que busca la destitución del funcionario. Los representantes Andy Biggs de Arizona, Ben Cline de Virginia, Clay Higgins de Luisiana, Andrew Garbarino de Nueva York, Michael Guest de Misisipi, Harriet Hageman de Wyoming, Laurel Lee de Florida, así como Michael McCaul y August Pfluger de Texas, también integran este grupo.

El gobierno de Biden tendría el derecho de que un representante o abogado comparezca para responder a los artículos de destitución contra Mayorkas. Eso incluye nombrar a demócratas de la Cámara de Representantes para que formen parte del equipo de la defensa.

En el juicio, los senadores fungirían como jurado en el juicio de Mayorkas. Para muchos, sería el tercer juicio político en el que participarían, tras los dos juicios políticos consecutivos a los que fue sometido el expresidente Donald Trump, en 2020 y 2021. En última instancia, los senadores celebrarían una votación sobre los cargos. Podrían acordar desestimar los artículos o emitir un veredicto.

El veredicto

Si un juicio avanza sin que se desestimen los cargos, se necesitaría una mayoría de dos tercios para condenar y destituir a Mayorkas, un resultado muy poco probable dado que los demócratas controlan el Senado. Los demócratas tienen la mayoría, con 48 escaños y los votos de tres senadores independientes que los apoyan. Los republicanos del Senado son minoría, con 49 escaños. Si los demócratas se mantuvieran unidos en su apoyo, Mayorkas sería absuelto aunque todos los republicanos votaran a favor de condenarlo.

De ser declarado culpable, según el Artículo II, Sección Cuarta de la Constitución, Mayorkas sería destituido de su cargo y el Senado votaría para inhabilitarlo de la función pública.

c.2024 The New York Times Company

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