La matemática electoral, a un mes de las presidenciales en Venezuela
Caracas, 28 jun (EFE).- A un mes de las elecciones presidenciales en Venezuela, las maquinarias de los principales candidatos -Nicolás Maduro y Edmundo González Urrutia- exhiben números según los cuales cada uno está más cerca de la victoria, tanto por el tamaño de sus organizaciones como por los apoyos estimados.
A estos dos contendientes se suman otros ocho que no tienen posibilidad numérica, pero que han generado ruido en los últimos meses y que -previsiblemente- subirán aun más el tono a partir del 4 de julio, cuando comenzará el tiempo formal de campaña.
A continuación, las cifras que giran en torno a las votaciones:
1.- La arquitectura electoral
Un total de 21.620.705 venezolanos están llamados a votar el 28 de julio, cuando el Consejo Nacional Electoral (CNE) habilitará cerca de 15.800 centros en todo el país, durante una jornada que se extenderá 12 horas, con una muy posible prolongación después de las 18:00 hora local (22:00 GMT) hasta que no haya votantes en cola.
Este censo está condicionado por la migración, pues, según agencias de las Naciones Unidas, unos 7,7 millones de venezolanos abandonaron el país en la última década y solo 69.211 electores podrán votar en el extranjero. El Ejecutivo rechaza las cifras de la ONU y estima que solo dos millones de venezolanos salieron del país, de los cuales la mitad ya regresó.
Varias instancias internacionales enviarán misiones de veeduría, incluida la Organización de Naciones Unidas (ONU), pese a la revocatoria de invitación a la Unión Europea (UE), una observación que había sido pactada entre el Gobierno y la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), el bloque que apoya a González Urrutia.
2.- La artillería proselitista
Más allá de los actos políticos, el chavismo y la PUD concentran sus esfuerzos en la movilización de activistas para el día de las elecciones, cuando esperan que sus promotores de campaña lleven al mayor número posible de venezolanos hasta las urnas y defiendan los votos como testigos electorales dentro de los centros.
La campaña González Urrutia asegura que más de 50.000 equipos, cada uno conformado por un número distinto de personas, apalancarán el apoyo a esta candidatura, que prevé desplegar 600.000 personas para vigilar cada arista del proceso, especialmente al considerar que el CNE actúa a favor del chavismo.
Del lado del oficialismo, el gobernante partido PSUV activó una aplicación digital y cuenta con miles de formularios con datos de votantes para buscar apoyos el 28 de julio. Para estos comicios, el chavismo toma como base un total de 4,2 millones de simpatizantes.
3.- La dupla y el gallo
La candidatura de Maduro, ampliamente promovida por los medios estatales, y la de González Urrutia, que acumula el mayor apoyo en las redes sociales, multiplicaron sus actos de masas en las últimas dos semanas y prevén ampliar sus actividades durante los 21 días de campaña.
El abanderado de la PUD conformó una dupla con la líder opositora María Corina Machado -impedida para competir en comicios por una sanción administrativa-, quien le endosa sus actos multitudinarios a lo largo y ancho del país, mientras el exembajador mantiene sus discursos breves y promesas sencillas, sin hacer mención al rival oficialista.
Maduro, en cambio, aparece cada día en el canal estatal VTV, que transmite sus mítines durante horas, tiempo en el que el mandatario promete resolver, a veces en cuestión de días, problemas que aquejan a las comunidades desde hace años. Además, el líder chavista, que se ha proclamado el "gallo fino" de la contienda, centra su discurso en atacar a la PUD.
4.- 13 años versus 70 días
A todo esto se suma una aparente guerra de encuestas, en la que se enfrentan las firmas que intentan pronosticar las posibilidades de González Urrutia -que era un perfecto desconocido hasta el 20 de abril, cuando la PUD decidió postular su nombre- y Maduro, en el poder desde 2013.
Las encuestadoras más tradicionales dan una ventaja que va desde los 20 hasta los 40 puntos de distancia al exembajador sobre el mandatario, mientras que un grupo de nuevas firmas -algunas creadas este año- siguen ubicando a Maduro como el candidato a vencer.
Héctor Pereira
(c) Agencia EFE