Masacre de París: un vídeo durante el concierto en la Sala Bataclan muestra el momento en el que empezó el tiroteo

Dura tan solo unos pocos segundos. No se ve sangre, ni cuerpos en el suelo, ni da siquiera apenas tiempo a a escuchar gritos de pánico, pero sirve para darse cuenta de la magnitud de lo sucedido. Ninguna de las 1500 personas que estaban en la Sala Bataclan el viernes para ver un concierto de Eagles of Death Metal imaginaba que esos primeros disparos capturados en el vídeo acabarían en un reguero de sangre de decenas de muertos y heridos. El grupo tocaba la sexta canción de su repertorio, Kiss the Devil. Entonces, ocurrió.

La secuencia, grabada por Seb Snow, muestra cómo se oyen los primeros disparos: el batería, Julian Dorio, se dio cuenta al momento de lo ocurrido y se intentó proteger tras el instrumento. Uno de los guitarras salió corriendo despavorido; otro, en primer plano, parecía quedar en estado de shock, expuesto a los disparos. Pudo reaccionar a tiempo.

“Estaban a mitad del espectáculo, oyeron disparos pero no podían ver bien por las luces; de pronto uno impactó sobre el escenario e instintivamente escaparon, salieron por la puerta y echaron a correr. Pudieron salir rápidamente porque estaban en un escenario que tenía salidas de emergencia justo detrás”, comentaba un hermano del batería a la cadena ABC News. Poco después, tras empezar a conocer la magnitud de lo ocurrido, el grupo actualizaba su muro de Facebook con este estado:

"Estamos todavía evaluando la seguridad y la localización de toda la banda y el equipo. Nuestros pensamientos están con toda la gente involucrada con esta trágica situación".La mujer del batería del grupo le ha contado al Washington Post que todos los miembros de la banda están seguros. "Aún estamos conteniendo la respiración; me llamó para decirme que me quería y que estaba a salvo".

Ellos tuvieron la suerte que le faltó a decenas de personas que también se encontraban en la sala. Poco después en el tiempo ocurría esto otro: el famoso vídeo grabado por un periodista de Le Monde a las afueras de la sala. Caos total, pánico, gente muerta en la calle y una multitud huyendo en medio de los disparos, algunos de ellos heridos, otros colgando de las ventanas, mientras el periodista autor de las imágenes trataba de preguntar qué es lo que estaba ocurriendo. Absolutamente dantesco.