Marina estaba embarazada cuando comenzó la guerra y ha aprendido a ser madre durante el conflicto

Además de las dificultades propias de la maternidad, Marina Melnyk ha vivido este año bajo el miedo de las sirenas antiaéreas, cumpliendo con un toque de queda y sin despegarse de las noticias ni un minuto para saber cuando buscar refugio de las bombas.