Mariano Puerta, sobre la final de Roland Garros 2005 ante Rafa Nadal: "Fue mejor que perdí"

Una de las cosas que más lamentó Mariano Puerta a partir de su doping en 2005, es que se haya perdido el "foco tenístico" de la final de Roland Garros, la primera después de la que habían definido otros integrantes de la Legión argentina: Gastón Gaudio y Guillermo Coria. El cordobés afirmó que si tuviera que medirse de nuevo frente a Rafael Nadal en el estadio Philippe-Chatrier no haría modificaciones estratégicas [el español, por entonces 5°, triunfó por 6-7 (6-8), 6-3, 6-1 y 7-5, en 3h24m]. Pero Puerta afirma que, a la distancia, sabiendo lo que vivió con el dopaje, fue mejor que cayera.

"Fue mentira ". A 15 años del doping, Puerta admitió que su defensa fue falsa

"No puedo reprocharme nada. Jugué bien el partido, lo planteé bien, no me guardé nada, tiré todo el partido, Nadal corrió mucho, se pasó gran parte del partido defendiendo, sobre todo en el primer set y en el cuarto. Y yo salí conforme. Lo dije en la entrega de premios, cuando agarré el micrófono. Fue un partidazo. Estaba feliz, orgulloso de lo que había podido hacer frente a un jugadorazo. Ya se sabía lo que se podía venir y mirá lo que vino después: ganó once más", rememoró Puerta, ante LA NACION, desde Miami, donde está viviendo desde hace unos meses (está radicado en los Estados Unidos desde 2014; antes de instalarse en la Florida estuvo en Dallas y Boston).

¿Cuáles fueron las claves del partido? "En el cuarto set tuve tres set points. Yo saqué 40-15 y 5-4. Después tuve otro set point. Estuve muy cerca de ir al quinto set. Fue un partido en el que tomé riesgos y no me guardé nada. Son cosas que rescato", narró. Pero sentenció: "Creo que fue mejor que perdí".

¿Por qué Puerta cree eso? "Pensá todo esto que viví [a partir de la sanción por doping] y si hubiera ganado. No me lo puedo imaginar. Así que mejor. A veces la pensás, cuando empecé a superar todo esto y a tratar de ver cosas buenas, dije: 'Una cosa buena: menos mal que no gané'. Porque el golpe mental, para mí, hubiese sido peor. Todo hubiera sido peor". Además de ser suspendido por dos años, el zurdo debió devolver el dinero ganado en Roland Garros y en ese semestre (US$ 887.000).

Puerta no regresó a a Roland Garros. Ni como jugador, ni como turista. "He vuelto a París después de la final de 2005, pero nunca a pisar el club -contó el ex número 9 de ATP-. Me ha tocado ir algunos días de vacaciones, pero no quise ir al club. Todavía no estaba como hoy, pudiendo hablar. Recién ahora me volví a sentir anímicamente igual de bien que cuando estaba después de salir de esa final. Hoy estoy estable, con trabajo, proyectos, metiéndome de a poquito en lo que me encanta que es la construcción. Ya está. Hago un corte".

El TAS consideró "lamentable" que el ex tenista haya mentido en su defensa por el doping de 2005

En cinco partidos, Puerta pudo ganarle una vez a Nadal. Antes de la final del Abierto de Francia 2005, ya se habían medido tres veces, una de ella en el Challenger Tour. "Después de Roland Garros no volví a hablar con Nadal. Pero tenía buena relación con él, un buen trato en los torneos. Con el tío Toni sí teníamos más trato en los torneos. En 2003 había jugado la final de un challenger [NdR: en Aix En Provence] y le había ganado. En ese momento él venía como algo serio. Unas semanas antes le había ganado en Montecarlo a Albert Costa, que estaba Top Ten [NdR: 7°]. No era un desconocido para mí cuando lo enfrenté en Roland Garros".

Puerta dijo que nunca sintió la necesidad de contarle a Nadal lo que ocurrió con el doping en París. En 2015, Nadal le expresó a LA NACION: "A mí no me generó nada enterarme del doping, porque tenía el trofeo en casa. Pero a todos los que les quitó la posibilidad de competir por el título, entiendo que les habrá generado rabia". Al respecto, Puerta apuntó: "No hace falta aclarar que tengo un gran respeto y admiración hacia él. La historia del vaso no era la real, sé que daba para la duda, que era un poco rebuscada y tirada de los pelos. Se dijeron un montón de cosas. Me llegó que hasta el doping no era mío".