Maestros furiosos por nuevas normas de historia afroamericana de la Florida

La aprobación del nuevo plan de estudios de historia afroamericana de la Florida no sorprendió a Crystal Etienne.

Como maestra de Educación Cívica de séptimo grado en Miami-Dade, lo ha visto venir desde 2022. Asistió a varias sesiones de formación cívica en el último año —entre ellas una en la que el instructor afirmó que los presidentes George Washington y Thomas Jefferson se opusieron a la esclavitud, a pesar de que ambos eran dueños de esclavos—, por lo que los cambios eran algo esperado. Sin embargo, las nuevas normas adoptadas por el estado para la enseñanza de la historia de los afroamericanos dejaron a Etiennne mortificada.

La Junta de Educación de la Florida aprobó las nuevas normas el miércoles, causando un gran revuelo entre muchos. Algunos de los cambios más preocupantes incluyen enseñanzas sobre cómo los esclavos se beneficiaron de la esclavitud, un intento de contextualizar la esclavitud estadounidense en la historia mundial de la esclavitud y la falsa equivalencia de la violencia contra los afroamericanos con los actos de resistencia afroamericana.

La representante Anna Eskamani, demócrata de Orlando, quien asistió a la reunión del miércoles, señaló una parte de las normas de educación intermedia que exige que la instrucción incluya “cómo los esclavos desarrollaron habilidades que, en algunos casos, podían ser aplicadas para su beneficio personal”.

“Me preocupan mucho esas normas estándares, especialmente [...] la noción que los esclavos se beneficiaron de serlo. Es inexacta y una norma espantosa para que la establezcamos en nuestro currículo”, dijo Eskamani.

Etienne, profesor de West Homestead K-8 Center, se mostró igualmente perturbado.

“Es repugnante usar a los niños como peones como si fueran adultos”, dijo, calificando los cambios de “adoctrinamiento” en el “nacionalismo blanco y cristiano”. “Creen que si enseñas lo malo de alguna manera quita lo bueno y no es así. Si no se me permite enseñar la evolución del país y los cambios que se han hecho, ¿qué estoy haciendo?”

“Esto es fascismo en su máxima expresión”, dijo Karla Hernández-Mats, presidenta de United Teachers of Dade (UTD), que representa a los maestros de las escuelas públicas en Miami-Dade. “Esto es exactamente lo que hacen los gobiernos fascistas cuando censuran a los maestros cuando intentan suprimir contenidos de la enseñanza”.

Desde que la Legislatura de la Florida aprobó una serie de leyes educativas en los últimos dos años —desde otorgar a los padres el poder de cuestionar los libros hasta restringir cómo se enseña la identidad de género y la orientación sexual desde preescolar hasta octavo grado—, los maestros han estado preocupados, dijo Hernández-Mats.

Pero estos cambios relacionados con la historia de los afroamericanos “no son la forma en la que se debe educar a los alumnos”, dijo.

“Esto está estrechando las mentes”, dijo Hernández-Mats. “Queremos que los niños sean equilibrados, bien educados, que tengan acceso a una educación de alta calidad... pero cuando se restringe a los maestros de enseñar con honestidad y enseñar con la verdad, eso va a impactar en las conversaciones que somos capaces de entablar con nuestros estudiantes”.

Luego de los cambios en la asignatura de Estudios Afroamericanos

La controversia en torno a cómo se enseñará la historia afroamericana en las escuelas públicas de la Florida se produce después de la decisión de la Junta de Educación a principios de este año de omitir referencias en su nuevo curso de Estudios Afroamericano al movimiento Black Lives Matter y a las reparaciones de la esclavitud, entre otros temas. La decisión de la Junta se produjo después de que el gobernador Ron DeSantis criticara el curso piloto.

La Florida ya tiene un bajo rendimiento en la enseñanza de la historia afroamericana: aunque la instrucción se ha exigido desde 1994, solo 11 de los 67 distritos escolares del estado enseñan suficientemente la historia afroamericana, de acuerdo con Bernadette Kelley-Brown, investigadora principal y ex presidenta del Grupo de Trabajo de Historia Afroamericana, que monitorea cómo los distritos cumplen con la ley.

“Este nuevo estatuto dice ahora básicamente que, si se enseña historia afroamericana, se va a enseñar de una manera tan inapropiada, históricamente inexacta y diluida que la hace insostenible”, dijo el ex senador estatal demócrata Dwight Bullard, quien asistió a la reunión de la Junta de Educación en Orlando el miércoles.

La reunión parecía diseñada para disuadir a la persona promedio de ir, dijo Bullard. Se celebró en un día laborable en la parte trasera de un complejo turístico con estacionamiento a $28 (más de $30 por el servicio de valet). Una vez explicadas las directrices, se abrió un período de comentarios del público en que la gran mayoría se opuso a los cambios. Después, la Junta votó a favor.

“¿Cómo es posible que un grupo que no tiene diversidad racial proponga cambios en los estudios y la historia afroamericanos a los que se oponen activamente los afroamericanos que hablaron?”, dijo Bullard.

Dwight Bullard.
Dwight Bullard.

Antiguo profesor de historia de escuela secundaria, Bullard no podía concebir decir a sus alumnos que hay un “resquicio de esperanza en la esclavitud”. Luego dio un paso más.

“Imagínense el retroceso que supondría que el mismo profesor tratara de explicarles el lado positivo de la Alemania nazi”, dijo Bullard, ahora asesor político principal de Florida Rising, un grupo de defensa del derecho al voto en la Florida. “No solo no se permitiría, sino que habría indignación bipartidista ante la idea de que cualquier profesor, una profesora o un plan de estudios intentara enseñar el lado bueno de Adolf Hitler; sin embargo, ahora tenemos un estatuto de Historia Afroamericana que se supone que ahora te da esta noción del amo benevolente, el lado positivo o el beneficio de ser esclavo en Estados Unidos. Es una locura”.

Para Marvin Dunn, un hombre que ha hecho carrera manteniendo viva la historia afroamericana de la Florida, más recientemente a través de sus giras “Enseña la verdad”, los problemas con el nuevo plan de estudios eran abundantes. Calificó de rotundamente erróneo el “intento de alcanzar algún tipo de equivalencia para la violencia racial en nuestra historia”. Calificó de “perversa” la idea de que las personas esclavizadas se beneficiaron de su sometimiento y de francamente irrespetuosa la escasa mención de los linchamientos, que solo aparecían dos veces en la explicación de las directrices.

“Tus posibilidades de ser linchado en la Florida eran mayores que las de ser linchado en Mississippi y en Alabama”, dijo Dunn, profesor emérito de la Universidad Internacional de la Florida (FIU). “Ni siquiera mencionan estos incidentes de forma sustantiva en estos planes y nuestros estudiantes necesitan saber que estas cosas ocurrieron”.

Marvin Dunn inició las giras "Enseñar la verdad", que llevan a estudiantes de secundaria, sus padres y maestros a los lugares en donde ocurrieron algunos de los peores actos de violencia racial de la historia de la Florida. La primera fue el 8 de enero de 2021. (Foto de archivo del 13 de noviembre de 2021). Daniel A. Varela, Archivo del Miami Herald.

Despertar a los padres afroamericanos

Dunn también cuestionó por qué los estudiantes tenían que aprender sobre “la esclavitud en China, la esclavitud en Asia, la esclavitud en África” en un curso de historia afroamericana, algo que vio como un esfuerzo por mostrar que “éramos solo otro país que tuvo esclavitud”. La esclavitud estadounidense, sin embargo, era muy singular.

“Era el único sistema de esclavitud del mundo en que los esclavos eran definidas como propiedad, eran reducidas a bienes muebles”, dijo Dunn.

“Si un niño afroamericano se sienta en un aula en la Florida y escucha que sus antepasados se beneficiaron de la esclavitud, ¿cómo cree que reaccionará? dijo Dunn. “Se van a sentir heridos, se van a enfadar, van a contar a sus padres que esto se enseña en la escuela”.

Eso, en todo caso, es lo único positivo de la situación. “Estas normas han despertado a un gigante dormido que son los padres afroamericanos en este estado”, dijo Dunn.

Etienne concordó y dijo que ya está en contacto con muchos padres que expresaron su descontento. Él, por su parte, no tiene más remedio que acatar las nuevas directrices.

Lo que sí hará es animar a sus alumnos a que investiguen por su cuenta, a pensar críticamente, a responder a sus preguntas con honestidad.

“Mi plan es darles tanta información como sea posible para que puedan tomar sus propias decisiones”, dijo Etienne.

En este artículo se usó material de News Service of Florida.