Maduro indignado por ‘descuartizamiento’ en Miami de avión venezolano confiscado

El gobernante venezolano Nicolás Maduro se mostró el jueves iracundo por la destrucción en Miami de un avión de carga Boeing 747-300M que fue confiscado por Estados Unidos hace dos semanas por haber sido vendido por una aerolínea iraní a una sancionada empresa venezolana.

El avión se mantuvo por meses en el centro de un pleito diplomático involucrando a Venezuela, Argentina y Estados Unidos. La aeronave era propiedad de Mahan Air, una compañía iraní en la mira del gobierno estadounidense por su apoyo al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica-Fuerza Quds, según las autoridades. La fuerza islámica es una rama de las fuerzas militares iraníes y está designada por Estados Unidos como organización terrorista.

Maduro, quien había jurado dar una respuesta contundente al traslado del avión a Estados Unidos, dijo en un evento público que estaba realmente indignado tras ver las fotos del avión siendo destruido en el Sur de la Florida.

“Anoche fuimos informados de un acto vil, criminal, indignante en un aeropuerto de Miami, en la Florida, el imperio gringo vengativo perverso con toda su maldad procedió a descuartizar el avión de Emtrasur, el avión de Conviasa que nos secuestraron”, Maduro dijo en un evento transmitido en cadena nacional.

“Le quitaron el color de la bandera, le borraron el nombre de Luisa Cáceres de Arismendi, le borraron el nombre de Emtrasur y luego lo descuartizaron, y lo picaron a pedazos. Ese es el odio que le tienen a la Venezuela digna, a la Venezuela bolivariana. Es indignante”, agregó.

La fotografía de un avión de carga venezolano confiscado siendo destruido en la Florida llevaron al lider venezolano Nicolás Maduro a pronunciar un airado discurso el jueves 29 de febrero, en el que describió a Estados Unidos como un imperio vengativo.
La fotografía de un avión de carga venezolano confiscado siendo destruido en la Florida llevaron al lider venezolano Nicolás Maduro a pronunciar un airado discurso el jueves 29 de febrero, en el que describió a Estados Unidos como un imperio vengativo.

Hasta el momento no está claro si las fotos mostradas en Venezuela son legítimas y si de hecho el avión fue destruido. Fuentes policiales dijeron que normalmente las propiedades confiscadas son eventualmente vendidas en caso de que no pudieran ser usadas por las agencias gubernamentales. Agregaron que la destrucción de un avión Boing 747 costaría dinero y para las autoridades tendría mucho mas sentido venderlo.

La aeronave había sido detenida en Argentina en junio de 2022 con tripulantes venezolanos e iraníes sospechosos de estar involucrados en operaciones de espionaje. Tras meses de forcejeo diplomático, el Boeing 747 fue finalmente llevado desde el Aeropuerto Internacional de Buenos Aires al Sur de la Florida el 12 de febrero.

La aeronave fue propiedad de la empresa iraní Mahan Air y fue vendido a Emtrasur Cargo, filial de la estatal venezolana Conviasa, empresas que están sancionadas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.

Durante años, el gobierno estadounidense ha impuesto sanciones contra Irán, así como contra Venezuela, que mantienen estrechos vínculos y firmaron un plan de cooperación de 20 años en el momento del aterrizaje del avión de carga Boeing en Argentina.

En ese momento, el gobierno israelí elogió a Argentina por dejar en tierra el avión y sostuvo que al menos algunos de los tripulantes iraníes “estaban involucrados directamente en el tráfico de armas a Siria y a la organización terrorista Hezbolá del Líbano”.

Las autoridades argentinas detuvieron el avión Boeing, incluida una tripulación de 14 venezolanos y cinco iraníes, tras su escala en Buenos Aires en ruta para transportar piezas de automóvil a Uruguay, según informes publicados.

El piloto del avión, Gholamreza Ghasemi, fue identificado como ex comandante del Cuerpo de Guardia de la Revolución Islámica y accionista y miembro del consejo de administración de una filial de Mahan Air, según la orden de incautación estadounidense. Las autoridades argentinas registraron el avión y encontraron un diario de vuelo de Mahan Air en el que se documentaban los vuelos del avión tras la transferencia ilegal a Emtrasur, según la orden de incautación. Entre ellos: un vuelo a Teherán en abril de 2022.