Macron pedirá en la cumbre de la UE una nueva derogación de la obligación del barbecho

París, 26 ene (EFE).- El presidente francés, Emmanuel Macron, pedirá en la cumbre de la Unión Europea (UE) del próximo 1 de febrero una nueva derogación de la obligación de dejar un 4 % de la tierra en barbecho, y simplificar la PAC, dentro de las medidas para tratar de aplacar las protestas de sus agricultores.

"Hay que simplificar la PAC, es un hecho", afirmó este viernes su primer ministro, Gabriel Attal, desde una granja de Montastruc de Salies, al norte de Toulouse, a donde se desplazó para desgranar una panoplia de ayudas en favor del sector agrícola, que desde hace ocho días ha aumentado la presión sobre su Gobierno con bloqueos de autopistas y carreteras por todo el país.

Attal, que prometió también acelerar los pagos de la Política Agraria Común (PAC), de la que Francia es el primer beneficiario con 9.000 millones de euros al año, dijo que "aunque Europa es nuestra mejor protección, tenemos que mantenernos firmes para defender nuestra agricultura".

"No queremos depender de los demás para nuestra alimentación", subrayó antes de señalar que una de sus prioridades es "no dejar nuestra agricultura en manos de la competencia desleal".

Fue su respuesta a una de las quejas más repetidas por los agricultores en sus protestas de los últimos días: tener que competir con productos producidos con reglas medioambientales o sociales menos estrictas que en Francia.

Por eso anunció que Francia continuará exigiendo en las negociaciones comerciales de la UE las llamadas 'cláusulas espejo', es decir que los otros bloques económicos que busquen un acuerdo con Europa tendrán que asumir sus reglas sanitarias, medioambientales y sociales para poder exportar a los Veintisiete sus productos.

Exención fiscal al gasóleo agrícola

Attal accedió a una de las principales exigencias de los agricultores, el mantenimiento de las exenciones fiscales al gasóleo agrícola, con un cambio en la gestión para acabar con unos procedimientos que exasperan a muchos beneficiarios.

De aquí al verano, esa exención se les aplicará automáticamente cada vez que vayan a repostar gasóleo, de forma que no tendrán que avanzar el dinero y luego reclamar el reembolso a final de año. Además, prometió que desde el mes de febrero se les pagarán los avances que hayan hecho (hasta ahora cobraban al final del año).

El primer ministro hizo una cascada de anuncios para "simplificar drásticamente los procedimientos" administrativos y burocráticos, que concretó en diez medidas que estarán incluidas en un decreto que debe publicarse mañana.

Esa simplificación significará, por ejemplo, que el plazo para presentar un recurso contra un proyecto agrícola -por ejemplo para construir un depósito de riego- se reducirá de cuatro a dos meses, se suprimirá una instancia de recurso y se creará "una presunción de urgencia" por la que los jueces tendrán que dictaminar en un periodo máximo de diez meses.

Igualmente indicó que una explotación no podrá ser objeto de más de un control administrativo al año.

Mano dura con la distribución

El primer ministro avanzó que la llamada 'ley Egalim' que estipula las reglas de negociación entre los agricultores, los industriales y los grupos de distribución, y que no se podrán fijar precios por debajo de los costos no tiene todo el efecto esperado y por eso Gobierno va a poner una "presión máxima" y más controles.

Una presión que concretó avanzando que se han constatado infracciones y que habrá "tres sanciones muy duras contra empresas importantes", a las que no nombró. "No nos temblará el pulso", aseguró. Horas antes, el ministro de Economía, Bruno Le Maire, había recordado que las multas pueden alcanzar el 2 % de la facturación de las compañías infractoras.

Attal desgranó también una retahíla de ayudas sectoriales o regionales: para las explotaciones de viticultura afectadas por la crisis de exceso de producción, para las de Bretaña afectadas por el último temporal o para el reembolso de los gastos de veterinario.

El discurso del primer ministro fue una gran operación de comunicación, junto a un cobertizo de la granja que había visitado, y utilizando como mesa una paca de paja, y fue seguida con ansiedad en directo en las decenas de puntos de bloqueo en los que participaron varios miles de tractores por todo el país.

Bloqueos que paralizaron la circulación en cientos de kilómetros de autopistas y que desde primera hora de la tarde cortaron algunos de los principales ejes de acceso a París. EFE

(c) Agencia EFE