Cuando México goleó 4 - 0 a E.U. en 2004

Mochilazo en el tiempo

Hace 20 años, la selección mexicana sub-23 obtuvo un cardíaco pase para competir en los Juegos Olímpicos de 2004. El partido de semifinales del Torneo Preolímpico, en contra de la escuadra estadounidense, fue el más controversial y decisivo para que el equipo nacional llegara a la justa olímpica en Atenas.

Liza Luna

EL UNIVERSAL

La rivalidad futbolística entre México y Estados Unidos tuvo un episodio peculiar en 2004, cuando ambas escuadras se enfrentaron en el llamado Torneo Preolímpico de Fútbol de la Concacaf por un pase para los Juegos Olímpicos de Atenas.

La clasificación olímpica se definió en los estadios Jalisco y Tres de Marzo, de la entidad jalisciense, entre el 2 al 12 de febrero de 2004, con la presencia de las selecciones sub-23 de Jamaica, Trinidad y Tobago, Costa Rica, Honduras, Panamá, Canadá, Estados Unidos y México.

La selección nacional quedó en el Grupo B y se enfrentó contra Trinidad y Tobago, Jamaica y Costa Rica en la primera fase.

En el encuentro del 2 de febrero entre la sub-23 de México y la de Trinidad y Tobago careció de dinamismo. Aunque la escuadra mexicana ganó con 3 goles a 1, la contundencia del equipo no complació a sus fanáticos; "México debió golear, lamentablemente no se dieron las cosas", comentó Ricardo Antonio La Volpe, director técnico de los seleccionados nacionales, tras el enfrentamiento preolímpico.

La segunda presentación, ahora contra Jamaica, tuvo mejores resultados, derrotando a la selección jamaiquina con 4 tantos a 0. Eso aseguró un pase a semifinales y una gran oportunidad para adjudicarse un lugar en la gesta olímpica.

Costa Rica fue un contrincante más difícil, pues su encuentro terminó 1 a 1. "Volvimos a padecer del gol, pero estamos con el objetivo de ir a Atenas; el martes [10 de febrero] vamos por todo", mencionó La Volpe tras finalizar el partido contra los "ticos". La escuadra nacional quedó en segundo lugar de su grupo, teniendo que enfrentarse en semifinales al temible y prometedor Estados Unidos.

Victoria y polémica frente a los estadounidenses

Un pase olímpico para Atenas 2004 se debatió entre México y Estados Unidos, con el partido del 10 de febrero de 2004 en el Estadio Jalisco. La escuadra nacional se enfrentó al rival más desafiante del Torneo Preolímpico y los aficionados dudaron si funcionaría la dirección de La Volpe.

De acuerdo con el sitio "MedioTiempo", el partido tuvo dominio azteca desde el primer minuto de juego. El equipo nacional se impuso sobre los estadounidenses gracias a su localidad y rapidez, aunque los visitantes también tuvieron un peligroso desempeño en el terreno mexicano.

El primer tanto para México cayó al minuto 25, gracias a Rafa Márquez Lugo, entonces delantero del Monarcas y figura del partido contra Estados Unidos. El segundo gol se logró apenas dos minutos después, obra de Diego Martínez, capitán de la sub-23 y entonces defensa del Necaxa. Con eso bastó para agitar los ánimos en el Estadio Jalisco y alterar a los norteamericanos.

Las jugadas de México continuaron durante el segundo tiempo y los seleccionados estadounidenses quedaron detrás de la defensa y ataque mexicano. Juan Pablo "Loco" García, entonces delantero del Atlas, tuvo un desempeño ejemplar y fue artífice de grandes pases para gol.

El marcador aumentó al minuto 56, cuando Márquez Lugo anotó de nuevo en la portería de D.J. Countess. Para ese momento, la desesperación de Estados Unidos llevó a algunos de sus jugadores a cometer faltas y jalones contra la escuadra nacional, recursos que de nada les sirvieron.

Ismael Íñiguez, entonces mediocampista de los Pumas, cerró el marcador 4-0 al minuto 91, confirmando el pase de México a los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. "Perdimos ante un gran rival, auguro un buen futuro a México", sostuvo el entonces técnico de Estados Unidos, Glenn Myernick.

Al día siguiente, los medios nacionales celebraron el desempeño de los mexicanos en el Torneo Preolímpico y dieron una buena nota a la dirección técnica de Ricardo La Volpe. "Con fútbol, goles y técnico, el Tricolor humilla a Estados Unidos y se queda con el boleto a los Juegos Olímpicos", se publicó en EL UNIVERSAL en su edición del 11 de febrero.

Pero, lejos de la victoria mexicana en el balompié, el encuentro en el Estadio Jalisco fue el más polémico de la justa preolímpica por culpa de la afición.

De acuerdo con The New York Times, gran parte de los asistentes abuchearon el himno estadounidense, entonaron un innecesario cántico de "¡Osama, Osama!" y gritaron "Gringos, ¡ch***uen a su m***e!", como una forma para descomponer a los adversarios. "Es nuestra manera de mostrarles que podemos ganar", comentó un asistente al diario neoyorkino.

Algunos gritos y recriminaciones se dirigieron contra la figura de Estados Unidos, el delantero Landon Donovan, quien estuvo envuelto en un desafortunado escándalo el día anterior al partido, pues cámaras de EL UNIVERSAL y de otros medios lo cacharon orinando en el campo del Jalisco durante su preparación del 9 de febrero, acto que ofendió a muchos seguidores y periodistas.

El entonces vocero de la selección estadounidense, Bryan Chenault, negó tal acción de su delantero estrella y que "eso sólo fue [una publicidad] para encender a los aficionados. Es completamente falso, no hay forma que Landon hubiera cometido dicha falta de respeto".

Campeón del Preolímpico y con boleto para Atenas

Con el boleto a Atenas en la bolsa, México podía relajarse durante su nuevo encuentro frente a Costa Rica en la final del Torneo Preolímpico. El partido se celebró el 12 de febrero de 2004, en la conveniente cancha del Estadio Jalisco.

Aunque la afición continuó apoyando a los seleccionados nacionales, el ánimo en gradas no se comparó con la verbena e irreverencia vistas en el encuentro contra Estados Unidos.

El enfrentamiento estuvo parejo, con pocas oportunidades de gol para ambas escuadras, pero con una evidente superioridad del cuadro "tico". Tras 97 minutos en el campo y sin goles, llegó un "regalo dorado" para México, según lo describió esta casa editorial, gracias a un cuestionable penal.

Diego Martínez cobró la penalización y coronó a la selección sub-23 como campeona de la justa preolímpica, con el marcador 1-0, dando por terminado el torneo de febrero del 2004.

Seis meses después, el desempeño de la escuadra nacional y de La Volpe como su entrenador tuvieron un mínimo impacto en los Juegos Olímpicos de Atenas, pues México quedó eliminado en la Fase de Grupos. Apenas jugó tres partidos –una derrota, un empate y una victoria–, obteniendo sólo 4 puntos y el 10° lugar de la competencia, de 16 selecciones participantes.

La racha olímpica no mejoró para Beijing 2008, cuando la selección mexicana sub-23 no clasificó, pero su fortuna se recuperó en Londres 2012, donde ganaron la medalla de oro, única en su historia.