Luisa González, la recia candidata que arropa la vuelta del correísmo al poder en Ecuador

Quito, 18 ago (EFE).- Luisa González es la única mujer de los ocho candidatos presidenciales que participarán el próximo domingo en los comicios generales en Ecuador y su postulación arropa la posibilidad de que el correísmo vuelva a gobernar el país.

Su designación no fue casual, pues encarna el espíritu recio de la mujer manabita (de la provincia costera de Manabí), una tierra de gente pujante que se vanagloria del legado del "Viejo Luchador", el caudillo Eloy Alfaro, referente del liberalismo de principios del siglo XX y dos veces presidente de Ecuador.

Luisa Magdalena González Alcívar, de 45 años, no duda en afirmar que su principal asesor, si llega a la Presidencia, será el exmandatario Rafael Correa (2007-2017) y que intentará recuperar el legado que dejó el líder durante su decenio presidencial.

Justamente, el eslogan de su campaña es "Recuperar la patria" que, según ella, se desmoronó durante los gobiernos de Lenín Moreno (2017-2021) y de Guillermo Lasso (2021-2023), acérrimos rivales de Correa.

La candidata del correísmo nació por accidente en Quito, el 22 de noviembre de 1977, cuando sus padres disfrutaban de vacaciones en la capital del país, pero de inmediato volvió a Canuto, una localidad rural de la ciudad de Chone, en la provincia costera de Manabí.

CIEN POR CIENTO MANABA

Por eso ella se reconoce como cien por ciento "manaba" y "montubia", como se denomina a los campesinos de la costa, diestros en el manejo de los caballos, hábiles con el machete, tiernos en el hogar, como reza el tópico.

Le gusta la tonga, un guiso de pescado con maní (cacahuete) cocido en hojas de plátano y que se sirve con arroz, muy popular en el campo manabita, donde se bebé "caña" de la región, un aguardiente también recio.

Vivió su infancia y juventud junto a sus abuelos en Canuto, en el campo, donde aprendió a disfrutar de la naturaleza, a trabajar arduamente, a ejercitarse permanentemente y a ser disciplinada, según ha contado en varias oportunidades.

Todavía hoy vuelve donde sus abuelos a buscar refugio y consejo de ellos, que continúan con la tarea de educar en valores a los dos hijos de Luisa.

La candidata estudió en la Universidad Internacional del Ecuador, donde obtuvo el titulo de abogada, y alcanzó una maestría en Economía y Desarrollo en la Universidad Complutense de Madrid.

UNA POLÍTICA FRAGUADA CON CORREA

Su vida política la fraguó junto a Rafael Correa, en cuya administración ocupó los cargos de coordinadora de la Agenda Estratégica Presidencial (2010), viceministra de Gestión Turística (2014), secretaria general del Despacho Presidencial (2015) y secretaria nacional de la Administración Pública (2017).

También ejerció de vicecónsul de Ecuador en Madrid (2011) y cónsul en Alicante (España), en 2017, además de secretaria general de la Intendencia de Compañías de Quito.

Se lanzó a la política activa luego del fin del mandato de Correa, siempre cobijada por su pensamiento político, y en 2021 fue elegida como integrante de la Asamblea Nacional (Parlamento).

Luisa González empezó a jugar un rol importante en el equipo de dirección de Revolución Ciudadana. Su nombre comenzó a sonar justo después de que el presidente Lasso anunciará en mayo pasado su decisión de invocar la llamada "muerte cruzada", por la que disolvió el Parlamento y llamó a elecciones extraordinarias.

Lasso expidió el decreto de disolución de la Asamblea Nacional cuando el Legislativo se preparaba para votar una moción de censura en contra del mandtario en un juicio político en el que era acusado de presunto peculado (malversación) en una empresa pública.

El grupo parlamentario de Correa parecía tener la fuerza suficiente para echar del poder a Lasso, pero el gobernante volcó todo con la "muerte cruzada", que también le obligó a poner fin a su presidencia, que comenzó en 2021 y debería haber terminado en 2025.

En junio pasado, Revolución Ciudadana designó a Luisa González como su candidata presidencial, en binomio electoral con Andrés Arauz, candidato presidencial en 2021 y ahora postulante a la Vicepresidencia.

La correísta ha gastado suela en los recorridos de campaña y se muestra convencida de que Revolución Ciudadana goza de buena salud y de la confianza necesaria del electorado para volver al poder y recomponer lo que, según ella, "ha destruido Lasso".

Fernando Arroyo León

(c) Agencia EFE