Los niños enfrentan más amenazas cuando cruzan la calle que lo que piensan los padres

Por Lisa Rapaport 16 abr (Reuters) - Un estudio pequeño sugiere que los niños no lograrían percibir con precisión cuán cerca pasarán los automóviles de una esquina o cuánto demorarían en cruzar una calle de manera segura. Con realidad virtual, los autores analizaron con qué frecuencia los niños quedarían en el medio del tráfico en la vida real y los resultados demuestran que "los padres sobreestimarían la precaución en sus hijos" y pasarían por alto oportunidades para enseñarles hábitos más seguros, según comentó vía e-mail la autora principal, doctora Barbara Morrongiello, profesora de psicología de la Universidad de Guelph, Ontario. Con su coautor Michael Corbett convocaron a 139 niños con sus padres para participar de un experimento virtual: cruzar las calles de Guelph, que es una comunidad suburbana a 45 minutos de Toronto. Los participantes utilizaron auriculares con una pantalla con tecnología 3D y sensores de movimiento para detectar cada paso real que daban en las calles virtuales. Se pararon en la esquina de un cruce de calles de dos vías con aceras. El ruido de los automóviles era cada vez más fuerte a medida que se acercaban. Luego de un cruce de prueba para que los niños practicaran con el equipo, el equipo les pidió que cruzaran la calle virtual cuando pensaban que era seguro hacerlo. Los autores estimaron la cantidad de segundos que habrían demorado los vehículos en atropellarlos mientras cruzaban la calle. Luego, los padres repitieron el experimento y respondieron cuándo pensaban que sus hijos intentarían cruzar la calle. Los padres dijeron que sus hijos no cruzarían la calle cuando los automóviles estuvieran a menos de cuatro segundos de distancia, pero los niños tendieron a hacerlo con una distancia aún menor, de tres segundos. Los automóviles virtuales atropellaron a los niños el 6 por ciento de las veces. Los niños de entre 7 y 9 años tendían a cruzar la calle cuando un automóvil estaba a 2,95 segundos de distancia, mientras que sus padres pensaban que lo harían con 4,19 segundos. Los niños más grandes, de entre 10 y 12 años, cruzaron la calle con una distancia de 3,03 segundos, cuando sus padres esperaban que lo hicieran con 3,85 segundos. En Injury Prevention, los autores señalan que estos niños suburbanos quizás no estaban tan pendientes del tráfico como sus pares urbanos, a la vez que podrían exponerse más al riesgo en el mundo virtual que en el mundo real. Aun así, los resultados revelan un peligro real, según opinó el doctor Frederick Rivara, vicepresidente de pediatría de University of Washington, Seattle. "Los padres tienen que conocer muy bien el nivel de desarrollo de sus hijos", sostuvo Rivara, que no participó del estudio. "Lo denomino el efecto de Lago Wobegon: todos los padres piensan que sus hijos están por sobre la media cuando, desde ya, la mayoría de los niños son la media. La cuestión con la seguridad del peatón es que un error equivale a una lesión infantil grave." FUENTE: Injury Prevention, online 31 de marzo del 2015.