Lionel Messi concluye la gira interminable con Inter Miami: lesionados, apenas un triunfo y pocas conclusiones para el DT

Lionel Messi gesticula a sus compañeros en una escena del amistoso disputado en Tokio entre Inter Miami y Vissel Kobe
Lionel Messi gesticula a sus compañeros en una escena del amistoso disputado en Tokio entre Inter Miami y Vissel Kobe - Créditos: @Eugene Hoshiko / AP

Al último amistoso de Inter Miami en su caótica gira de pretemporada lo consumió la expectativa. Que si Lionel Messi jugaba, que si no disputaba siquiera un minuto por su edema en uno de sus aductores. Los precios de los tickets variaron entre los 67 dólares del asiento más económico hasta los ¡20 mil dólares! de una ubicación VIP, cercana al banco de suplentes del equipo rosa y que incluía un encuentro cara a cara con el astro argentino. Al Estadio Nacional de Tokio asistieron apenas 28.614 espectadores, algo más de la mitad de su capacidad (54.224 personas). El ocho veces ganador del Balón de Oro perdió, en esta ocasión, con la música: el pitazo inicial coincidió con la primera hora del recital de Taylor Swift en el Tokyo Dome, a quince minutos en tren urbano del Estadio Nacional. La cantante estadounidense fue aclamada por 55 mil personas que agotaron las entradas para la primera función del Eras Tour en territorio nipón.

El empate 0 a 0 entre el equipo itinerante de la MLS y Vissel Kobe, el campeón japonés -que también está de pretemporada y se impuso 4-3 en los penales- tuvo una omnipresente promoción en la capital japonesa. El distrito de Shibuya, epicentro del entretenimiento en esa ciudad, apareció teñido de rosa en los días previos y lució gigantografías del astro argentino, como para que nadie perdiera de vista el encuentro. La buena noticia para los fanáticos de la Pulga fue que el rosarino, recuperado de su edema en uno de sus aductores, estuvo en el banco de suplentes. Su ingreso al partido, entonces, era cuestión de tiempo.

Lionel Messi maniobra con la pelota durante el amistoso entre Inter Miami y Vissel Kobe
Lionel Messi maniobra con la pelota durante el amistoso entre Inter Miami y Vissel Kobe - Créditos: @Eugene Hoshiko / AP

Messi, en definitiva, jugó media hora. En rigor, 34 minutos de un partido que no tuvo mitad de la cancha y en el que Inter Miami volvió a pecar de una defensa inocente y un mediocampo sin piernas. Para colmo, Sergio Busquets, el referente de la sala de máquinas del equipo, se lesionó en la primera parte al recibir un pisotón en su pie izquierdo. Asistido por los médicos, se retiró hacia los vestuarios. En principio, por precaución. No deja de ser otro contratiempo para Gerardo “Tata” Martino, entrenador del equipo estadounidense. Ya había lamentado la ausencia de Facundo Farías (rotura de ligamentos cruzados, se perderá toda la temporada) y de Benjamín Cremaschi (hernia deportiva, entre dos y tres meses fuera de las canchas) y tenía a Messi entre algodones. En aquel primer tiempo, además de Busquets, el español Jordi Alba sufrió una paralítica. Para alegría del Tata, el lateral izquierdo pudo seguir jugando.

“Después del entrenamiento del martes, Leo nos dijo que se sentía bien, por lo que tomamos la decisión de que jugara 30 minutos”, dijo Martino en la conferencia de prensa posterior al partido en Tokio. Y añadió: “Estaba muy contento después del encuentro porque se sintió cómodo en la cancha”. Sobre el trámite del encuentro, el ex entrenador de Newell’s, Barcelona y la selección argentina opinó: “Creo que fue un partido parejo. Ellos jugaron mejor en la primera parte, tuvieron oportunidades para anotar y nosotros mejoramos en el segundo tiempo”. Y sobre la cálida recepción que tuvo el equipo -seguido por miles de peregrinos en sus tres escalas asiáticas: Riyad, Hong Kong y Tokio- el Tata señaló: “Estamos muy agradecidos por cómo nos han recibido en Tokio, no sólo en el estadio, sino también en toda la ciudad. De la misma manera apreciamos el trato de la gente de Hong Kong y de Arabia Saudita. En los tres lugares hemos sido muy bien tratados y tenemos una profunda gratitud por ello”.

Messi saluda a los hinchas tras el partido en Tokio

El partido con Vissel Kobe terminó de una forma algo bizarra: Inter Miami parecía no tener una lista de pateadores para una eventual definición por penales, tal como ocurrió. Y por más que hubo seis disparos (la paridad se mantuvo tras los cinco iniciales), Messi no se encargó de ninguno. Toda una sorpresa. Sólo dos futbolistas comparecieron ante la prensa: DeAndre Yedlin y Jordi Alba. “Fue increíble jugar en esta hermosa ciudad y en este maravilloso país. Estamos tratando de que nuestras ligas crezcan y hay un gran potencial en ambos lados”, dijo Jedlin, ex jugador de Tottenham y Newcastle, en la Premier League. Su compañero Jordi Alba agregó: “Fue un muy buen partido en un gran ambiente. Será un gran recuerdo y también nos servirá para lo que intentamos conseguir esta temporada. Competimos ante un muy buen rival, especialmente en el segundo tiempo. Cuando Leo ingresó nos ayudó mucho”.

Desde el primer partido de la gira globetrottiana de Inter Miami por el mundo, Messi disputó 238 minutos, distribuidos en cinco partidos, a saber: 45 contra El Salvador (empate sin goles); 64 minutos ante Dallas (derrota 1-0), 88 minutos frente a Al-Hilal (caída 4-3), un cameo de siete minutos en Riyad ante Al-Nassr (goleada en contra por 6-0) y los 34 minutos de este miércoles frente al monarca japonés. En el medio, su no comparecencia en Hong Kong en la única victoria del equipo en toda la pretemporada: 4-1 ante Hong Kong XI. En total, la superestrella de Inter Miami redondeó un promedio de 39 minutos por encuentro. Ni siquiera un tiempo. Demasiado poco para una gira que pretendía instalar en el mundo la marca del equipo rosa. Pero mucho para un futbolista que ya tiene 36 años y que viene de casi dos meses de vacaciones: su último partido oficial data del 21 de noviembre, ante Brasil y en el Maracaná.

Gerardo Martino observa cómo Lionel Messi se alista para ingresar al campo de juego durante el segundo tiempo del amistoso entre Inter Miami y Vissel Kobe disputado en Tokio
Gerardo Martino observa cómo Lionel Messi se alista para ingresar al campo de juego durante el segundo tiempo del amistoso entre Inter Miami y Vissel Kobe disputado en Tokio - Créditos: @Philip Fong / AFP

Para encontrar un triunfo por los puntos de Inter Miami hay que remontarse al 20 de septiembre del año pasado: 4-0 a Toronto. Messi apenas jugó 37 minutos. No convirtió ni dio una asistencia. Desde entonces pasaron seis encuentros de preparación y ocho partidos oficiales. Apenas le ganó a Hong Kong XI. Conclusión: una única victoria amistosa en los últimos ¡14! compromisos. Y en ese triunfo no tuvo a su principal futbolista. Desde lo deportivo, la pretemporada no le deja ninguna conclusión positiva al Tata Martino. Más allá de lo que haya facturado la tesorería y del marketing detrás de cada presentación, Inter Miami se pareció más a Lionel Messi FC que a una franquicia con aspiraciones de ser competitiva durante la temporada que está por comenzar. Y eso que tendrá cuádruple competencia: MLS, Concachampions, US Open Cup y League Cup. Consumir las energías de una columna vertebral que supera los 30 años (además de los 36 de Messi, Luis Suárez tiene 37; Busquets, 35 y Jordi Alba, 34) no parece ser la mejor estrategia para un equipo que puede llegar a disputar 66 partidos entre febrero y diciembre. El tiempo dirá.

Para cumplir con los últimos cuatro partidos, el plantel de Inter Miami viajó casi 22 mil kilómetros: de Miami a Riyad (12.029 km), de Riyad a Hong Kong (6.810 km) y de allí a Tokio (2.879 km). Hizo apenas dos prácticas abiertas al público -con todo lo que eso implica para el cuerpo técnico-, una en tierras hongkongesas y otra en territorio nipón. En lugar de “Go global”, la travesía pudo haberse llamado “La Pulga Tour” . Fue, en definitiva, una prueba para el magnetismo del ídolo argentino.

Más de 50 mil fanáticos de Taylor Swift se dieron cita en el Tokyo Dome para ver a la cantante, cuyo poder de atracción superó al mismísimo Lionel Messi
Más de 50 mil fanáticos de Taylor Swift se dieron cita en el Tokyo Dome para ver a la cantante, cuyo poder de atracción superó al mismísimo Lionel Messi - Créditos: @Richard A. Brooks / AFP

Una cuenta fácil entre la cantidad de kilómetros (21.718) recorridos para estos cuatro partidos en Asia y los minutos disputados por Messi en los cuatro encuentros (129) arroja una cifra de 168 kilómetros en el aire por cada sesenta segundos de Messi en cancha. Los ingresos de Inter Miami, que aprovechó la gira para presentar varios auspiciantes (entre ellos, una bodega argentina que será su sponsor oficial de vinos) corren por otro carril. Los dos partidos en Arabia Saudita, por ejemplo, tuvieron una facturación aproximada de 10 millones de dólares sólo por entradas. En Hong Kong hubo 40 mil personas en la cancha que se quedaron con las ganas de ver al argentino. Y otras tantas pagaron para presenciar el entrenamiento de la jornada previa.

A Inter Miami le tocará ahora subirse al último avión y recorrer los casi 12 mil kilómetros que separan Tokio de Miami. El plantel deberá recuperarse del jet-lag acumulado y volver a habituarse al horario de la Florida. Martino y su cuerpo técnico no disponen de mucho tiempo para sacar conclusiones sobre una pretemporada tan llena de viajes como de resultados negativos (una victoria, dos empates y tres derrotas). El físico, justamente, fue uno de los factores que limitó la progresión de Inter Miami la temporada pasada. El Tata lo anunció en agosto. Su equipo no se clasificó para los playoffs porque fundió el motor antes de tiempo. La pretemporada 2024, exigente como nunca, augura más de lo mismo.