Liberales alemanes cierran congreso en el que trataron destacar su identidad

Berlín, 22 abr (EFE).- Berlín, 22 abr (EFE).- El Partido Liberal Alemán (FDP) cerró este domingo un congreso en el que, además de reelegir a su presidente -el ministro de Finanzas, Christian Lindner- procuró destacar sus señas de identidad frente a los otros socios de la coalición de Gobierno.

Los discursos y documentos programáticos aprobados este domingo pueden hacer pensar, a quien no sepa que se trata de un congreso de uno de los tres partidos de Gobierno, que el FDP está en la oposición.

Lo más concreto es una resolución que pide cambios a un proyecto de ley ya aprobado por el Consejo de Ministros para exigir que a partir de 2024 en las construcciones nuevas solo se puedan instalar calefacciones que funcionen con un mínimo de 65 por ciento de energías renovables.

El proyecto del ministro de Economía, Robert Habeck, de Los Verdes, que salió adelante tras concesiones de los otros partidos en otros campos, había sido aprobado por el Consejo de Ministros también con el voto de los ministros liberales.

La resolución de hoy no es vinculante para la cúpula pero puede reforzar a sectores del grupo parlamentario que quisieran más "FDP puro" en el trabajo de Gobierno.

"Las leyes no las aprueba el Consejo de Ministros sino el parlamento", dijo el diputado Frank Scheffler, el impulsor de la iniciativa.

En otros documentos se pide una mayor austeridad presupuestaria y se critica el abandono de la energía atómica

El FDP viene de tener resultados decepcionantes en cinco comicios regionales. En Baja Sajonia y en Berlín incluso se quedaron por fuera de los parlamentos regionales.

En la coalición en Berlín, en la que es el partido más pequeño, el FDP tiene que procurar conciliar posiciones justo con las dos agrupaciones -el Partido Socialdemócrata (SPD) y Los Verdes- a los que ha identificado normalmente como rivales ideológicos en su historia reciente.

Los liberales tienen todavía presente el trauma de la última vez que habían estado en una coalición de Gobierno, con la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Angela Merkel.

Al final de la legislatura el FDP se quedó, en las elecciones de 2013, por debajo del 5 por ciento y con ello por fuera del Bundestag.

Desde entonces hay en el partido una especie de pánico a que se difumine su identidad ideológica por alianzas gubernamentales. En 2017 Lindner incluso rompió las negociaciones de coalición con la CDU y Los Verdes con una afirmación que se ha hecho celebre según la cual "es mejor no gobernar que gobernar mal".

En 2021 terminó admitiendo en entrar la alianza inédita con verdes y desde el momento en que entró en el Gobierno ha procurado permanente dejar su sello generando en ocasiones conflicto dentro de la coalición, en especial con Los Verdes.

Algo que se ha hecho emblemático es la oposición a la prohibición del motor de combustión que llevó a que en la UE, por presión de Alemania, se introdujeran excepciones para motores que funcionen con combustibles sintéticos.

También han logrado que los planes para leyes de protección de clima sean menos drásticas que los que proponían Los Verdes sobre todo en temas relacionado con el tráfico.

Lindner, además, en su condición de ministro de Finanzas, no pierde oportunidad de presentarse como guardián de la austeridad y en exigir permanentemene la reducción de los planes de gasto a los ministerios que están manos de verdes y socialdemócratas.

Sin embargo, todo ello no parece satisfacer del todo de algunos sectores del partido que consideran que todavía se hacen demasiados compromisos en la coalición.

En las puertas del recinto del congreso hubo manifestaciones de grupos ecologistas que consideran a FDP como el partido que frena dentro de la coalición los intentos por tomar medidas en contra del cambio climático.

(c) Agencia EFE