Yahoo Noticias Un vídeo en el minuto 20: el homenaje absurdo a las víctimas del coronavirus que pretende implantar La Liga
Todos estamos de acuerdo en que la pandemia de coronavirus que está azotando todo el planeta ha sido particularmente cruel en España, donde, a falta de que se aclare el baile de cifras, hemos sufrido varias decenas de miles de muertos. La sociedad tiene el deber de mantener a los fallecidos en su memoria y no olvidarse jamás de los familiares, amigos y vecinos que hemos perdido en estos meses de pesadilla. Por eso están surgiendo todo tipo de iniciativas, desde las institucionales hasta las más espontáneas... pero algunas, quizás, con más acierto que otras.
La que pretende implantar la Liga con motivo del regreso de la competición, que si todo va bien será a mediados de junio, puede parecer bonita en principio, pero si uno se pone a analizarla fríamente verá que no es ni de lejos la mejor de las ideas. Según informa Marca, la Liga está preparando un vídeo de homenaje a las víctimas, con la participación de deportistas y personalidades relevantes de la sociedad, con intención de emitirlo en todos los partidos que se disputen. Literalmente “en” los partidos: la intención es que el árbitro pare el juego en el minuto 20 y las imágenes aparezcan en los videomarcadores.
¿Llamativo? Mucho. ¿Emotivo? Sin duda. ¿Emocionante? Si el vídeo les queda bien (y teniendo detrás la maquinaria audiovisual de Mediapro, no hay por qué dudar de ello), seguramente. ¿Sensato? Quizás no tanto. No el vídeo en sí, que no hace mal a nadie, sino la decisión de interrumpir el partido para proyectarlo.
Porque no tiene ningún sentido cortar repentimamente el partido, frenando el ritmo de juego y dando a los jugadores y entrenadores una detención, una especie de “tiempo muerto” que el reglamento no contempla y que no ha habido durante el resto de la temporada (lo que algunos clubes que ya han tenido que disputar encuentros difíciles contra rivales directos pueden interpretar como un agravio). Y menos para poner un vídeo que, en un estadio sin público, nadie podrá ver. Salvo los propios jugadores y técnicos, que probablemente estarán concentrados en el juego, o deberían estarlo por pura profesionalidad, y no le harán mucho caso a las pantallas.
¿Que se trata de que le llegue a los espectadores que contemplan el partido desde sus casas? Perfecto: hay quince minutos de descanso ideales para este tipo de cosas. Nadie va a echar de menos los anuncios de casas de apuestas si en su lugar se sustituyen por esta iniciativa. O si se prevé que durante el intermedio la audiencia caiga, se le reservan los instantes inmediatamente anteriores al saque de centro inicial.
Pero en el minuto 20 no tiene ninguna lógica. Además, ¿por qué el 20 y no otro? ¿Tiene el 20 algún simbolismo especial que el común de la ciudadanía se haya perdido, más allá de ser el año en el que estamos? ¿O simplemente ha sido fruto de la decisión caprichosa de algún dirigente al que sencillamente le ha dado por ahí?
Si sale adelante la iniciativa, esperemos que, al menos, tengan el detalle de grabar varias versiones. Porque faltan once jornadas completas por disputarse, es decir, ciento diez partidos. A la quinta vez que alguien vea el mismo vídeo estará harto y o bien no le hará el menor caso o bien reaccionará hasta con hostilidad ante lo que considerará una pérdida de tiempo. Probablemente no sea ese el objetivo de los promotores del proyecto, al que no se niegan sus buenas intenciones pero sí su capacidad, tal como está planteado, de llevarlas a cabo.
