Líder supremo Irán dice que "enemigos" pueden apuntar a trabajadores mientras las protestas arrecian

Foto de archivo del líder supremo de Iran, ayatolá Ali Jamenei, en un evento en Teherán

DUBÁI, 19 nov (Reuters) - Las protestas continuaron el sábado en las universidades iraníes y en algunas ciudades, mientras el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, advirtió que los "enemigos" del país podrían intentar movilizar a los trabajadores tras fracasar en su intento de derrocar al Gobierno islámico en más de dos meses de disturbios.

Las protestas, uno de los desafíos más audaces a los dirigentes clericales de Irán en décadas, han ido ganando fuerza, frustrando a las autoridades que han culpado a los enemigos extranjeros de la nación y a sus agentes de orquestar los disturbios.

"Hasta esta hora, gracias a Dios, los enemigos han sido derrotados. Pero los enemigos tienen un nuevo truco cada día, y con la derrota de hoy, pueden apuntar a diferentes clases, como los trabajadores y las mujeres", dijo la televisión estatal citando a Jamenei.

Las mujeres y los estudiantes universitarios han desempeñado un papel destacado en las manifestaciones callejeras contra el Gobierno, agitando y quemando pañuelos para denunciar el estricto código de vestimenta islámico de Irán.

La ola de disturbios estalló en septiembre después de que la mujer kurda-iraní Mahsa Amini muriera bajo la custodia de la policía de la moral del país tras ser detenida por llevar ropa considerada "inapropiada".

Las protestas se extendieron al vital sector de la energía el mes pasado, pero las manifestaciones de los trabajadores, que han abordado en parte reivindicaciones relacionadas con las condiciones salariales y laborales, han sido limitadas.

En 1979, una combinación de protestas masivas y huelgas de los trabajadores del petróleo contribuyó a que el clero llegara al poder en la revolución islámica de Irán.

El sábado, la agencia de noticias activista HRANA dijo que se estaban llevando a cabo huelgas de brazos caídos y protestas en dos docenas de campus de la capital, Teherán, y en las principales ciudades, como Isfahan, Tabriz y Shiraz.

HRANA dijo que hasta el viernes habían fallecido 402 manifestantes en los disturbios, incluidos 58 menores. También murieron unos 54 miembros de las fuerzas de seguridad, añadió. Más de 16.800 personas han sido detenidas, destacó.

Los medios de comunicación estatales dijeron el mes pasado que habían muerto más de 46 miembros de las fuerzas de seguridad. El Gobierno no ha proporcionado una estimación de un recuento de muertes más amplio.

El poder judicial iraní, de línea dura, ha condenado a muerte a cinco manifestantes y ha dicho que juzgará a más de 2.000 personas acusadas de disturbios.

(Reporte de la redacción de Dubái. Editado en español por Javier Leira)