Kishida envía ofrenda al polémico santuario Yasukuni en aniversario de II Guerra Mundial

Tokio, 15 ago (EFE).- El primer ministro japonés, Fumio Kishida, envió este jueves una ofrenda ritual al santuario Yasukuni en Tokio, lugar de gran controversia con países vecinos por sus vínculos militaristas, en el 79 aniversario de la rendición de Japón en la Segunda Guerra Mundial, que marcó el fin del conflicto.

La ofrenda se produce un día después de que Kishida anunciara su decisión de no presentarse a la reelección en las próximas primarias del Partido Liberal Democrático (PLD) el mes que viene, con vistas a promover "un cambio" y "una renovación" en la formación gobernante tras un escándalo de fondos políticos, y poniendo fin en la práctica a su mandato de tres años como primer ministro.

Kishida envió la ofrenda al santuario, considerado un símbolo del pasado militarista de Japón, en lugar de visitarlo en persona, como ya había hecho anteriormente y siguiendo el ejemplo de anteriores mandatarios nipones que desde 2013, cuando Shinzo Abe se personó entre polémica para realizar la ofrenda, no asisten personalmente.

Quienes sí se desplazaron hasta el lugar hoy fueron el ministro de Defensa, Minoru Kihara, y el ministro encargado de Revitalización Económica, Yoshitaka Shindo, augurando críticas de los países vecinos que sufrieron el colonialismo nipón en la época de la guerra y que suelen protestar ante este tipo de actos.

"He visitado el santuario con profundo respeto por aquellos que en su día trabajaron con todo su corazón y alma por el país", declaró Shindo a la cadena pública japonesa NHK. El ministro también visitó el santuario en los pasados festivales de otoño y primavera.

En Yasukuni se honra a los caídos por Japón entre finales del siglo XIX y 1945, más de 2,4 millones de personas, entre las que figuran 14 políticos y oficiales del ejército imperial condenados por un tribunal internacional como criminales de guerra de clase A tras la Segunda Guerra Mundial.

La ofrenda y visitas coinciden con la conmemoración del 15 de agosto, fecha en la que el emperador Hirohito pronunció el mensaje de rendición de Japón durante la Segunda Guerra Mundial, un anuncio que puso fin al conflicto tras los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki.

Las visitas pasadas de primeros ministros, la de otros parlamentarios e incluso las ofrendas a Yasukuni han suscitado duras críticas por parte de China y Corea del Sur, países que sufrieron agresiones bélicas de Japón y donde el recuerdo del militarismo japonés antes y durante la guerra es muy profundo.

En un aparente intento de evitar la confrontación con los países vecinos, los últimos primeros ministros han enviado ofrendas rituales al santuario, que habitualmente consiste en un árbol "masakaki", con motivo de sus festivales de primavera y otoño, así como para esta fecha señalada sobre la Segunda Guerra Mundial.

(c) Agencia EFE