Jurado otorga $3 millones a contratista de basura en un juicio por corrupción en Opa-locka

Un jurado otorgó $3 millones a un contratista de basura que demandó a Opa-locka en 2017 alegando corrupción y extorsión en una ciudad que durante años ha estado plagada de turbulencias financieras y políticas.

Después de un juicio civil de cinco días, el jurado emitió el veredicto el viernes. Concluyeron que la ciudad no actuó de buena fe con Universal Waste Services of Florida, Inc. (UWS), el contratista que presentó la demanda. El veredicto es el último golpe para una ciudad que ha estado bajo supervisión financiera estatal durante los últimos seis años y un recordatorio de su historia de corrupción, incluyendo una investigación del FBI en 2016 que llevó a la condena de varios funcionarios de la ciudad.

Los representantes de UWS formularon acusaciones de extorsión contra el ex comisionado de la ciudad Terence Pinder, quien murió en un aparente suicidio en 2016, dos días antes de que estuviera previsto que se entregara por cargos de soborno estatales.

“Uno de los mensajes del veredicto es que, además de que los funcionarios públicos se arriesgan a ir a la cárcel, las ciudades se van a arriesgarse a veredictos multimillonarios si no están atentas a que no ocurran este tipo de cosas”, dijo el abogado Michael Pizzi, que representó a UWS. “Creo que toda la sala quedó atónita ante los intentos explícitos de los funcionarios de Opa-locka de extorsionar el pago de sobornos a cambio de prorrogar un contrato. Se podía oír caer un alfiler”.

Pizzi se refería al testimonio del director de operaciones de UWS, Robert Turitto, que también es un antiguo sargento del Departamento de Policía de Nueva York.

Turitto testificó que su empresa invirtió $3.5 millones en nuevo equipamiento tras aceptar hacerse cargo del contrato del anterior recolector de basura durante el año y medio aproximado que le quedaba al contrato de la ciudad con la anterior empresa. Una vez que UWS asumiera el contrato y empezara a trabajar, declaró Turitto, la ciudad iba a conceder una prórroga del contrato de tres años. Sin la promesa de esa prórroga, dijo, UWS no habría invertido en una nueva flota de camiones, bidones y otro equipamiento, según las transcripciones del juicio.

Pero la ciudad acabó cancelando el contrato después que UWS se negó a pagar una suma de seis cifras, declaró Turitto. Esto dejó a UWS en una situación financiera difícil, dijo.

Según el testimonio de Turitto, él y el presidente ejecutivo de UWS, Joseph Spiezio III, quien murió en 2021, se reunieron con Pinder en el patio de UWS en 2015. Pinder supuestamente les dijo que el contrato era una buena oportunidad para UWS, pero que la empresa necesitaba “compartir la riqueza”. Entonces les prometió cinco votos de la comisión municipal a favor de la extensión del contrato a cambio de un pago de $125,000, alegó Turitto.

“Obviamente, me quedo con la boca abierta”, declaró Turitto ante el tribunal la semana pasada.

Durante dos reuniones posteriores, declaró Turitto, la empresa volvió a rechazar la oferta de Pinder. Después de esas tres reuniones, dijo, la ciudad denegó una prórroga del contrato a UWS y finalmente se lo adjudicó a un competidor.

Aunque el veredicto del jurado favoreció al contratista, los miembros del jurado también fallaron a favor de Opa-locka en siete de las nueve defensas de la ciudad, incluyendo que UWS indujo fraudulentamente un contrato por omisión; que UWS acordó cancelar sus contratos de residuos sólidos residenciales y comerciales para sustituirlos por nuevos contratos; y que UWS debía proporcionar una fianza de cumplimiento a la ciudad pero no lo hizo.

El abogado Miguel De Grandy, que representó a la ciudad de Opa-locka en el juicio, dijo que las conclusiones de esas defensas afirmativas niegan el fallo de $3 millones.

“Uno no puede recuperar en un contrato al que uno entró fraudulentamente”, dijo De Grandy. “Propondremos una sentencia al tribunal que sea coherente con el veredicto”.

De Grandy dijo que la ciudad presentará “las mociones apropiadas”, pero declinó especificar en qué consistirán esas presentaciones. Añadió que no conoce las finanzas de la ciudad, por lo que no sabe si Opa-locka tiene o no la capacidad de pagar los $3 millones.

Pizzi dijo que tiene la intención de cobrar lo indicado por el veredicto: “Nuestra expectativa es que la ciudad pague hasta el último centavo”.