Jurado de Miami declara culpable a ex primer ministro de Islas Vírgenes Británicas de complot para importar cocaína. Enfrenta cadena perpetua

Un primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas actuó como el ficticio agente de la CIA Jason Bourne cuando un miembro de un cártel mexicano le propuso usar sus puertos para enviar cocaína a Estados Unidos, dijo el jueves 8 de febrero un abogado defensor en el juicio por narcotráfico contra el político en Miami.

Andrew Fahie llevó el papel de Bourne aún más lejos cuando aceptó millones en sobornos del traficante para que el primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas pudiera descubrir si el contrabandista quería destruirle en nombre del gobierno británico que controla el territorio caribeño, dijo su abogada durante el alegato final.

“Al Sr. Fahie le preocupaba no gustarle a los británicos”, dijo a los jurados su abogada, Theresa Van Vliet. “El Sr. Fahie sabía que alguien intentaba destituirle de su cargo de primer ministro”.

Los jurados, sin embargo, no creyeron la defensa de Bourne.

El jurado federal de Miami, compuesto por 12 personas, declaró a Fahie culpable de conspirar para importar cocaína a Estados Unidos junto con tres cargos relacionados de lavado de dinero y crimen organizado tras un juicio de dos semanas. Los jurados deliberaron durante solo cuatro horas antes de tomar una decisión sobre el destino del primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas.

Fahie fue arrestado en abril de 2022 en Miami tras una operación encubierta de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA). Enfrenta hasta cadena perpetua en su sentencia el 29 de abril ante la jueza de distrito federal Kathleen Williams.

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La jueza ordenó a Fahie, que no mostró ninguna emoción al conocerse los cuatro veredictos de culpabilidad, que se entregara de inmediato a las autoridades penitenciarias. El acusado, de 53 años, fue escoltado esposado por un agente del Servicio Federal de Alguaciles hasta el Centro Federal de Detención próximo al tribunal.

El gobierno estadounidense presentó su caso de contrabando de cocaína contra el ex primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas haciendo pasar a un informante confidencial por traficante del cártel mexicano. El informante, que respondía al nombre de “Roberto”, recopiló cientos de conversaciones grabadas y mensajes de texto con el primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas, Andrew Fahie, mientras discutían pagos de sobornos millonarios para acceder al territorio británico, según los fiscales.

Fahie aceptó que miles de kilos de cocaína pasaran por sus puertos para ser vendidos en Estados Unidos debido a su “avaricia, arrogancia y corrupción”, añadieron los fiscales, que afirmaron que Fahie necesitaba los pagos de sobornos para construirse una mansión frente al mar en las Islas Vírgenes Británicas.

“Está totalmente involucrado; no tiene ninguna reticencia ni duda”, dijo el fiscal Kevin Gerarde a los jurados durante el alegato final.

“No está jugando a ser Jason Bourne”, dijo su colega fiscal Sean McLaughlin, refiriéndose al ficticio agente de la CIA famoso en libros y películas, que fue entrenado como asesino encubierto y creía que sus antiguos jefes querían matarle.

“Lo que es, es un político corrupto”, añadió McLaughlin refiriéndose a Fahie.

El equipo de defensa de Fahie argumentó que no tenía intención de usar su poder para enriquecerse con los envíos de cocaína a Estados Unidos. Más bien, sus abogados alegaron que fue “incriminado” por Reino Unido, que controla el archipiélago de las Islas Vírgenes Británicas como territorio de ultramar.

No obstante, la evidencia del juicio reveló que la operación fue dirigida por la DEA, y no por el gobierno británico. En el momento de la operación de la DEA, el gobierno de Reino Unido estaba concluyendo una investigación sobre corrupción en la administración de Fahie, pero las autoridades británicas señalaron que no estaba relacionada con la operación de la DEA.

Visita a Miami llevó a su fin

El fin de Fahie se produjo el 28 de abril de 2022, cuando él y la directora del puerto de las Islas Vírgenes Británicas, Oleanvine Pickering Maynard, visitaron Miami para asistir a una convención de cruceros. Durante su visita, fueron atraídos a un aeropuerto de Miami para verificar un enorme pago en efectivo que les había prometido el informante de la DEA que se hacía pasar por miembro del cártel de Sinaloa.

La operación culminó con los arrestos de Fahie y Maynard, de 61 años, que dio lugar a una encausamiento que los acusó de conspiración para importar cocaína e involucramiento en lavado de dinero, así como de tentativa de lavado de dinero y asociación ilícita. El hijo de Maynard, Kadeem Stephan Maynard, de 32 años, también fue arrestado en el Caribe, trasladado a Miami y añadido como tercer acusado.

Tras su arresto, Fahie obtuvo una fianza de $1 millón y se le permitió vivir con su hija en el sur de la Florida. Pero Fahie fue despojado de su cargo oficial como primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas, que ocupó desde febrero de 2019 hasta principios de mayo de 2022.

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Antes del juicio de Fahie, los dos coacusados se declararon culpables de conspiración para traficar cocaína. Oleanvine Maynard, ex directora del puerto de las Islas Vírgenes Británicas, testificó en su contra.

Fahie y Maynard fueron arrestados por agentes de la DEA cuando los funcionarios extranjeros acudieron al Aeropuerto Ejecutivo de Miami-Opa-locka para verificar el supuesto pago de $700,000 en efectivo en un avión que creían destinado a ellos en las Islas Vírgenes Británicas, según consta en los registros judiciales.

Maynard y su hijo, Kadeem Maynard, ambos detenidos en Miami, admitieron en sus declaraciones de culpabilidad que el plan consistía en acordar proporcionar protección a los supuestos envíos de miles de kilos de cocaína del informante de la DEA a través de la isla de Tórtola, en las Islas Vírgenes Británicas, con destino a Estados Unidos, a cambio de una parte de los multimillonarios beneficios.

En noviembre, Kadeem Maynard, de 32 años, fue sentenciado a casi cinco años de prisión. Su acuerdo de culpabilidad no le obligaba a testificar en el juicio de Fahie.

El abogado de Kadeem Maynard, José Rafael Rodríguez, argumentó que él desempeñó un “papel relativamente menor” en la trama de importación de cocaína al presentar al informante de la DEA a su madre y coordinar las reuniones entre el informante, la madre y el primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas, Fahie.

En su declaración de culpabilidad, Oleanvine Maynard admitió que presentó el informante a Fahie y que juntos usaron su autoridad para facilitar el supuesto plan de contrabando de cocaína. Su sentencia está prevista para después del juicio de Fahie.

Una serie de reuniones enigmáticas

La investigación encubierta de Estados Unidos comenzó en el otoño de 2021 con varias reuniones misteriosas entre el informante confidencial de la DEA que se hacía pasar por el contrabandista de drogas mexicano y un grupo que afirmaba ser operadores libaneses de Hezbolá con conexiones con los líderes del territorio caribeño, según una denuncia penal y una declaración jurada presentadas en el caso.

Con su ayuda, el informante acabó reuniéndose con Kadeem Maynard; su madre, Oleanevine Maynard, y posteriormente con Fahie, el primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas. A continuación, les indujo a proporcionar protección para supuestos envíos de cocaína colombiana a través de las Islas Vírgenes Británicas con destino a Miami, según la fiscalía.

A cambio, el informante, que afirmaba trabajar para el cártel de Sinaloa, prometió pagar al primer ministro y a la directora portuaria $700,000 al principio y millones más tarde como su parte de los envíos de cocaína previstos, todo ello durante reuniones grabadas en las Islas Vírgenes Británicas y Miami en marzo y abril de 2022, según las actas judiciales.

Tanto Fahie como Oleanvine Maynard, que estaban en Miami para asistir a una convención de cruceros, acudieron al aeropuerto de Opa-locka después de que el informante de la DEA y otro agente encubierto les dijeran que era su pago inicial, según la declaración jurada.

A lo largo de la declaración jurada, el informante de la DEA hizo hincapié en el papel fundamental del territorio británico –un archipiélago con una población de solo 30,000 habitantes que linda con las Islas Vírgenes de Estados Unidos– en la supuesta operación de contrabando de drogas del cártel mexicano. En una reunión grabada en Tórtola, el informante describió cómo el plan de transporte comenzaría con una prueba de 3,000 kilos de cocaína a Miami y acabaría haciéndolos ricos.

En un momento dado, durante una reunión celebrada el 7 de abril de 2022 con el primer ministro de las Islas Vírgenes Británicas, la directora portuaria y el hijo de esta, el informante entregó a Fahie $20,000, diciendo que “se trataba de un regalo de buena fe para sellar que teníamos un acuerdo”, según la declaración jurada.

A pesar del gesto, Fahie seguía desconfiando del informante de la DEA y le preguntó si era un agente encubierto. El informante dijo que no lo era y le dijo a Fahie: “Bueno, en primer lugar, no vas a tocar nada”, en referencia a los envíos de cocaína previstos.

Fahie respondió: “Tocaré una cosa, el dinero”.