Jonathan Majors tenía un historial de abusos en sus relaciones, según las mujeres
Desde que el actor Jonathan Majors fue declarado culpable en diciembre de agredir y acosar a una novia, sostiene que es inocente, con la esperanza de revivir una carrera que en su día fue exitosa y que se desintegró a raíz de su condena. En una entrevista televisada el mes pasado, dijo que “nunca había golpeado a una mujer”.
Pero en declaraciones previas al juicio ante la fiscalía en ese caso de agresión y, por separado, en entrevistas con The New York Times, otra antigua novia, Emma Duncan, lo acusó de maltratarla emocional y físicamente: estrangularla, tirarla y dejarle moratones. Una tercera, Maura Hooper, también dijo que había sufrido abuso emocional.
Duncan y Hooper, las actrices que salieron con Majors antes de que saltara a la fama como el supervillano Kang en los proyectos de Marvel, hablaron por primera vez sobre el tema y lo describieron como una figura controladora y amenazante que las aisló de sus amigos y de sus proyectos profesionales. “Pierdes tu sentido del valor”, dijo Duncan.
Y en entrevistas con antiguos colegas, el Times encontró que Majors tenía un historial de volatilidad en el set de la serie de HBO “Lovecraft Country” que incluía enfrentamientos con compañeras de trabajo que las hicieron quejarse ante la cadena.
El jueves por la tarde, una abogada de Majors, Priya Chaudhry, afirmó que Majors no había agredido físicamente a Duncan. Describió las relaciones con ambas mujeres como “tóxicas” y dijo que Majors asumía su responsabilidad en ellas. Añadió que “innumerables” mujeres de la industria del entretenimiento “pueden dar fe de su profesionalismo”.
Este artículo se basa en entrevistas con 20 personas, algunas de las cuales solicitaron anonimato por temor a repercusiones en su carrera y en declaraciones enviadas a la fiscalía en el caso de diciembre, en el que Majors fue declarado culpable de acoso y agresión menor en contra de Grace Jabbari, una exnovia. En abril está programada su sentencia, aunque, el martes, sus abogados solicitaron que el juez anulara el veredicto de culpabilidad del jurado.
EMMA DUNCAN CONOCIÓ a Majors, ahora de 34 años, en un programa teatral de verano en Chautauqua, Nueva York, y estuvo comprometida con él de 2015 a 2019, dijo. Maura Hooper, compañera de estudios cuando Majors asistía a la prestigiosa Escuela de Arte Dramático de Yale, salió con él de 2013 a 2015. Ambas dijeron que experimentaron sus tendencias a acercarse y distanciarse.
Al comienzo de sus relaciones, las llenó de atenciones y gestos que parecían románticos, incluido llamarlas “Sra. Majors” al poco tiempo de relación, un comportamiento manipulador que ahora saben que se puede considerar bombardeo de amor. Duncan comentó: “Al principio sientes ‘Ay, este hombre me ama’ y, luego, ‘Me está anulando’”.
Chaudhry, la abogada del actor, afirmó: “Estas relaciones eran entre estudiantes de arte dramático y todas comenzaron con intensidad mutua”.
En entrevistas y declaraciones previas al juicio ante los fiscales en el caso en el que se condenó a Majors, las mujeres detallaron varios episodios en los que él era un compañero dominante o violento.
Antes del juicio, las declaraciones se presentaron en virtud de la regla Molineux, que permite a un tribunal decidir si la parte acusadora puede presentar pruebas para demostrar un patrón de conducta. Sin pronunciarse públicamente sobre su relevancia, el juez del caso de Majors no admitió estas declaraciones como prueba, en virtud de un estándar muy elevado para permitir testimonios sobre comportamientos pasados.
El Times obtuvo las declaraciones antes del juicio. Poco después, este diario confirmó las interacciones que describen a través de múltiples amigos de las mujeres, en quienes confiaron, así como mediante entradas contemporáneas en diarios, mensajes de texto, fotos y, en el caso de Hooper, historiales médicos.
En julio de 2016, Duncan y Majors estaban conduciendo en Chautauqua cuando empezaron a discutir, y Majors “amenazó con estrangularla y matarla”, dice la declaración, uno de los varios ejemplos en que hubo violencia al principio de su relación.
Chaudhry confirmó que hubo una discusión en el auto, pero dijo que Majors no amenazó con estrangular o matar a Duncan.
Ese mismo mes, Duncan vistió a Majors en Santa Fe, Nuevo México, donde estaba filmando “Hostiles” junto a Christian Bale. Durante el viaje, descubrió que Majors le había mandado mensajes a otra mujer mediante el Apple Watch. Cuando Duncan lo confrontó, Majors arrojó el reloj desde la ventana de un taxi, un incidente que Chaudhry confirmó.
De regreso al hotel, Duncan comenzó a empacar sus cosas. Según la declaración, Majors “empujó a Duncan hacia el sofá y comenzó a estrangularla”. También dijo: “‘Te voy a matar’”. Luego, “la aventó hasta el otro lado de la habitación” y dijo: “Me voy a asegurar de que no puedas tener hijos”. Cuando ella intentó irse, se disculpó.
Chaudhry negó ese relato. “Esto no sucedió”, dijo la abogada, aunque reconoció que entre ellos “había habido muchas discusiones acaloradas”. La abogada afirmó que su cliente “ha decidido asumir la responsabilidad de su parte en esa relación tóxica, centrándose en sí mismo y atendiendo su depresión de toda la vida”.
Según la declaración, en febrero de 2019, volteó una mesa y rompió sillas en el departamento que compartían y destruyó las pertenencias de Duncan, así como recuerdos de familia, durante uno de sus muchos intentos de poner fin a la relación. Tiempo después, ese año, cuando ella se dio cuenta de que Majors seguía con una amante, él “empuñó la mano y dijo: ‘No me hagas golpearte’”. Poco después, ella lo dejó.
Chaudhry comentó que Majors negó haber empuñado la mano o haber dicho nada sobre golpear o hacer daño a Duncan y que “volcó su propia mesa plegable endeble” durante un incidente. Chaudhry acusó a Duncan de abofetear o golpear a Majors en la cara y la cabeza varias veces. No dio detalles al respecto.
Duncan afirmó que su propio relato estaba “bien documentado”.
“Confirmo los sucesos descritos”, dijo Duncan.
MAJORS HABÍA COMENZADO A ATRAER ATENCIÓN por su actuación cuando todavía estudiaba en Yale. Tras graduarse, su ascenso fue rápido y los directores alabaron su carisma, versatilidad y capacidad de reflejar matices.
En 2019, Majors comenzó el rodaje principal de "Lovecraft Country", su primer proyecto como actor principal. Aunque obtuvo una nominación a los Emmy, fue un rodaje difícil, según nueve personas relacionadas con la producción; el tema, que trataba sobre la raza en el Estados Unidos de mediados de siglo, era pesado, y los episodios, con elementos de ciencia ficción y terror, eran complicados, con jornadas largas y agotadoras.
En entrevistas con miembros del reparto y del equipo, describieron que el comportamiento de Majors cambiaba dependiendo de con quién estuviera. A menudo era amigo de los técnicos y trabajadores masculinos, pero con las mujeres podía ser irritable y propenso a discutir; las mujeres del set se advertían unas a otras que tuvieran cuidado con él, dijeron varias personas.
Jessica Pollini, actriz veterana con más de una década en la industria de televisión (“Boardwalk Empire”, “Yellowstone”), trabajó en el episodio 9 de “Lovecraft Country” como primera asistente de dirección, una función importante de gestión que requiere supervisar las tomas y al personal durante meses.
Al principio, Majors y ella solo se veían de pasada, dice. Pero cuando estaban terminando la producción después de un largo día, Majors se le acercó y le dijo, para su sorpresa, que tenían que hablar. Mientras otros miembros del reparto y del equipo se marchaban, él le indicó que debían ir al estrecho falso cuarto de baño del set, donde se plantó frente a ella.
“Recuerdo que me miraba de arriba a abajo”, dijo Pollini en una entrevista. “Es un hombre alto y corpulento y yo mido 1,60 metros”. Le dijo con tono serio que las cosas no estaban funcionando. “Me dijo: ‘Aquí no eres bienvenida’”, cuenta Pollini, llorando al recordar la manera en la que la increpó. No sabía qué había hecho mal y se sentía atrapada. “Pensaba: ‘¿Cómo voy a salir de esta situación?’, me acobardé. Tenía miedo”.
Relató que al final, calmó a Majors, le dijo que trataría de mejorar y él se fue. Pollini le contó de inmediato a dos colegas lo que había sucedido. En una entrevista con este diario, uno de ellos dijo que en todos sus años en la industria, nunca la había visto tan alterada.
La alentaron a reportar el encuentro a un productor, pero ella dudó, hasta que supo que otra mujer también había tenido experiencias perturbadoras.
Lisa Zugschwerdt, una veterana asistente de dirección que estuvo en “Lovecraft” desde el principio, dijo que tuvo una experiencia negativa con Majors al principio, cuando se enfadó por un cambio de horario que ella le había comunicado. A partir de entonces, trató de evitarlo.
Pollini y Zugschwerdt, junto con una tercera mujer del equipo, una asistente de producción, acabaron por quejarse de Majors ante HBO y la cadena le aconsejó disculparse. Lo hizo a regañadientes, dijo Pollini, usó el argumento de que había sido “un malentendido”. Pero las cosas no mejoraron después (un vocero de HBO se negó a hacer comentarios).
Chaudhry comentó que a Majors “nunca se le dijo que alguien tuviera algún problema con su comportamiento”.
LAS RELACIONES DE DUNCAN Y HOOPER con Majors coincidieron durante un breve periodo, aunque ninguna de ellas se percató de ello al principio.
Cuando Hooper y Majors comenzaron a salir, ella contó que él no tardó en expresar su profundo amor por ella, pero que también se volvió controlador, dictándole adónde podía ir, con quién podía relacionarse y cómo podía comportarse. No le permitía “hablar con nadie sobre su relación y la aisló de su red de apoyo”, según la declaración previa al juicio. Se convirtió en una sombra de sí misma, dijo una compañera de Yale.
Chaudhry describió a Majors como “joven e inseguro” en el momento de su relación con Hooper. “En retrospectiva, se avergüenza de algunos de sus comportamientos celosos”, dijo.
Hooper se embarazó a los pocos meses de relación. Cuando le dijo a Majors que había programado un aborto en dos semanas, él insistió en que adelantara la cita, dijo ella en una declaración. Majors la llevó a la clínica, donde le informaron que Hooper necesitaría a alguien que la llevara a casa, recordó ella. Pero cuando ella le llamó después para que fuera a recogerla, le dijo que iba a un ensayo. Según consta en la declaración, como creía que Majors no toleraría que hablara de la situación con nadie, no pudo llamar a nadie más; fingió que había ido por ella y se fue caminando a casa. “Me sentí atrapada y sola”, dijo más tarde en una entrevista con el Times.
Chaudhry aseveró que como tanto Majors como Hooper estaban en el mismo espectáculo, acordaron que no podían faltar los dos al ensayo y que ella buscaría la manera de regresar a casa tras el procedimiento. Hooper comentó que no estaban en el mismo espectáculo en aquel momento.
Un testimonio basado en la regla Molineux, como lo son las declaraciones de Hooper y Duncan, es una herramienta jurídica polémica. Los fiscales utilizaron con éxito este tipo de testimonio en las condenas de Bill Cosby y Harvey Weinstein, pero puede ayudar a abrir la puerta a una apelación de un veredicto de culpabilidad. En una audiencia previa al juicio, la defensa de Majors argumentó que la presentación sería perjudicial para su cliente y el juez estuvo de acuerdo. Los abogados del actor pretenden sellar de manera permanente el expediente con las declaraciones de las mujeres.
Para Duncan, el secreto equivale a la vergüenza. Según Duncan, revelarlo le permitió a ella y a otras personas en su misma situación encontrar apoyo y recuperación. “Creo en la redención”, dijo. “Pero no sin rendición de cuentas”.
c.2024 The New York Times Company