Jinete australiano Rose, el "imitador" de Borat, y su viaje cuesta arriba hacia los Juegos de París

Foto de archivo de Shane Rose y Virgil compitiendo en los Juegos de Tokio

Por Tassilo Hummel y Cordelia Hsu

PARÍS/SÍDNEY, 6 jun (Reuters) - Mientras Shane Rose dirigía su caballo por encima de una valla una vez más -sólo dos meses después de romperse casi 20 huesos en un accidente de entrenamiento-, el australiano sintió que su intento de recuperar la forma a tiempo para los Juegos Olímpicos era menos descabellado de lo que algunos habían pensado.

"Era lo que me faltaba", declaró a Reuters el tres veces medallista olímpico. "Cuando pude hacer eso y pude hacerlo razonablemente bien en mi primer intento, no había ninguna posibilidad de que no estuviera lo suficientemente en forma para París".

Rose, que acaparó los titulares de todo el mundo cuando lució un disfraz naranja de "mankini" al estilo de Borat durante un evento hípico a principios de este año, se había puesto en marcha para París con su caballo Virgil, de color castaño alazán, cuando las cosas se complicaron a mediados de marzo.

Sólo unos días después de conseguir su billete a París, el jinete de 51 años se cayó de un caballo durante una sesión de entrenamiento a campo traviesa. Rose pasó horas en el quirófano con el fémur, la pelvis, el codo y algunas costillas rotas.

"La recuperación fue larga y no necesariamente dolorosa, pero sí laboriosa", declaró Rose durante una entrevista en Bimbadeen Park, a una hora al suroeste de Sídney.

En mayo, cuando los médicos le permitieron volver a valerse por sí mismo, Rose volvió a montar a caballo. El hecho de no recordar nada del accidente le ayudó a reincorporarse rápidamente al trabajo.

El accidente de Rose, seguido de la muerte de la amazona británica Georgie Campbell tras una caída durante un torneo en Inglaterra sólo dos meses después, son un recordatorio de los peligros de este deporte.

Rose, que tuvo que someterse a una reconstrucción facial y estuvo una semana en coma inducido tras recibir una patada en la cabeza por parte de un caballo en 2006, dijo que tenía que ser paciente a pesar de correr contrarreloj para estar totalmente en forma para los Juegos.

"Sólo tenía una oportunidad de llegar a París. Si hubiera tenido algún contratiempo por el camino, probablemente habría significado perder mi oportunidad", afirmó.

El viaje de Rose a París peligró brevemente después de que se pusiera un "mankini" en un evento de disfraces cerca de Sídney y se presentara una queja ante Equestrian Australia. Sin embargo, multitud de internautas y sus patrocinadores apoyaron a Rose.

Las pruebas ecuestres de París se celebrarán en lo que antaño fue el coto de caza de los reyes franceses en Versalles, y el circuito campo a través de cinco kilómetros bajo tilos y robles está llamado a producir imágenes espectaculares.

(Reportaje de Tassilo Hummel y Cordelia Hsu; Editado en español por Héctor Espinoza)