Italia aprueba paquete laboral el Primero de Mayo entre críticas sindicales

La campaña electoral italiana continúa a medida que se acerca el día de las elecciones

Por Giuseppe Fonte y Alvise Armellini

ROMA (Reuters) - El Gobierno derechista de Italia aprobó el lunes medidas para impulsar el empleo y los salarios de los trabajadores, en medio de reacciones hostiles de los sindicatos y los partidos de la oposición por los recortes sociales y las normas más laxas sobre los contratos de trabajo a corto plazo.

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, facilitó que las empresas ofrezcan contratos de trabajo de entre 12 y 24 meses de duración y reducirá a finales de año el programa de alivio de la pobreza "salario ciudadano", introducido en 2019.

Su Gobierno también destinó unos 3.000 millones de euros (3.300 millones de dólares) a un rebaja durante seis meses de la llamada cuña fiscal, la diferencia entre lo que paga un empresario y lo que se lleva un trabajador a casa, pero solo para empleados con ingresos anuales no superiores a 35.000 euros.

"Es un paso concreto contra la crisis del costo de la vida", declaró el Ministro de Economía, Giancarlo Giorgetti, añadiendo que los recortes fiscales supondrán una media de 100 euros al mes.

En medio de las promesas del Gobierno de hacer frente a la crisis nacional de natalidad, Roma renunció a gravar este año las prestaciones complementarias de los empleados con hijos, hasta un máximo de 3.000 euros por trabajador.

Maurizio Landini, jefe del principal sindicato italiano, CGIL, criticó el paquete, afirmando que los salarios en Italia eran bajos debido a los elevados impuestos, pero también a un "nivel de inseguridad laboral" sin precedentes.

Anteriormente se quejó de que aprobar las medidas el 1 de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, era un "acto de arrogancia".

La ministra de Trabajo, Marina Calderone, defendió las reformas, afirmando que el Gobierno quería apoyar "a quienes necesitan trabajar, pero también a quienes quieren trabajar".

Meloni también ha dado prioridad a la reducción del "salario ciudadano", con el objetivo declarado de animar a las personas sanas a buscar trabajo.

Según un borrador visto por Reuters, los subsidios para los pobres de entre 18 y 59 años se reducirán a 350 euros al mes, frente al promedio actual de unos 550 euros por familia, limitados a una duración máxima de 12 meses y sujetos a la participación en programas de formación laboral.

Los hogares pobres con menores, pensionistas o discapacitados podrán optar a ayudas ligeramente más generosas, de más de 500 euros al mes, durante un máximo de 30 meses.

(1 dólar = 0,9095 euros)

(Editado en Español por Ricardo Figueroa)