Israel intensifica su mayor operativo en Cisjordania desde el comienzo de la guerra y mata a uno de los comandantes más buscados
JERUSALÉN.- En el segundo día de una “operación antiterrorista” a gran escala en Cisjordania, la mayor desde el pasado 7 de octubre, el ejército israelí indicó este jueves que mató a siete combatientes palestinos, entre ellos a un destacado líder de la Jihad Islámica, Mohammed Jaber, conocido como Abu Shujaa.
Entre las dos jornadas ya suman al menos 16 los muertos desde que el ejército israelí lanzó su operación con bombardeos e incursiones con convoyes blindados en las ciudades de Jenin, Naplusa, Tubas y Tulkarem y dos campos de refugiados, donde los grupos armados que luchan contra la ocupación de Israel son muy activos.
Latest developments in the occupied West Bank, including Israel's launch of large-scale military operations, are deeply concerning.
I strongly condemn the loss of lives, including of children, and I call for an immediate cessation of these operations. pic.twitter.com/ufTWrPcUT7— António Guterres (@antonioguterres) August 29, 2024
La intervención israelí despertó una “profunda preocupación” en la ONU, que advirtió que podría “alimentar una situación ya explosiva en Cisjordania ocupada”. Su secretario general, António Guterres, exigió el jueves en X su “fin inmediato” y condenó “firmemente las pérdidas de vidas humanas, sobre todo de niños”.
Las incursiones militares israelíes son habituales en Cisjordania, territorio palestino ocupado por el ejército israelí desde 1967. Sin embargo, es inusual que se lleven a cabo simultáneamente en varias ciudades.
Desde el comienzo de la guerra entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza, desencadenada por el mortífero ataque del movimiento islamista palestino en suelo israelí el 7 de octubre, la violencia ha recrudecido en Cisjordania.
Las autoridades israelíes ya habían afirmado el miércoles haber “eliminado” a nueve combatientes.
“Destrucción enorme”
El grupo insurgente Jihad Islámica confirmó este jueves que Mohammed Jaber, conocido como Abu Shujaa, fue asesinado en la ciudad de Tulkarem. Para muchos palestinos se había convertido en un héroe a principios de este año cuando, tras ser declarado muerto en un operativo israelí, apareció por sorpresa en el funeral por otros insurgentes, donde fue levantado a hombros por una multitud que lo aclamaba.
Según el ejército, Jaber fue abatido junto a otros cuatro milicianos en un tiroteo con las fuerzas israelíes cuando los cinco se escondían dentro de una mezquita. El líder muerto estaba vinculado a numerosos ataques contra israelíes, incluyendo un tiroteo letal en junio, y estaba planeando más, agregó el ejército.
Otro insurgente fue arrestado durante la operación en Tulkarem y un efectivo de la Policía Fronteriza paramilitar israelí sufrió heridas leves, añadió el ejército.
Casi la mitad de la ciudad de Tulkarem está sin agua y en el campo de Nur Shams, no había agua en absoluto, señaló un empleado municipal, Hakim Abu Safiyeh. “La destrucción es enorme”, agregó.
La ONU cifró el miércoles en al menos 637 los palestinos abatidos por el ejército israelí o por colonos en Cisjordania desde el 7 de octubre. Al menos 19 israelíes, incluyendo soldados, murieron en ataques palestinos o en operaciones del ejército, según datos oficiales israelíes.
“Anexar Cisjordania”
Según los acuerdos de paz israelo-palestinos de Oslo de 1993, el ejército israelí no debe entrar en las zonas autónomas situadas bajo el control exclusivo de las fuerzas de seguridad de la Autoridad Palestina, que administra parcialmente Cisjordania.
El jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, advirtió que la operación israelí “en Cisjordania ocupada no debe constituir una extensión de la guerra de Gaza, incluyendo una destrucción a gran escala”.
El ministro de Relaciones Exteriores israelí, Israel Katz, señaló que el objetivo del ejército es “desmantelar las infraestructuras terroristas irano-islamistas” en Cisjordania.
Pero el movimiento Jihad Islámica acusó a Israel buscar “anexar Cisjordania” con estas operaciones.
Irán denunció “la destrucción brutal de las infraestructuras urbanas y de los servicios” e instó a la comunidad internacional a tomar “medidas inmediatas y eficaces para poner fin al genocidio de la nación palestina”.
Sin tregua en Gaza
En tanto en la Franja de Gaza, un territorio gobernado por Hamas desde 2007, la Defensa Civil dio cuenta de ocho muertos en nuevos bombardeos en el norte, y tres palestinos perecieron en un ataque con dron en el sur.
El ejército israelí indicó que atacó unos 40 “blancos terroristas” en Gaza en las últimas 24 horas y que eliminó a “decenas de terroristas”, uno de los cuales, según el comunicado, participó en el ataque del 7 de octubre.
Ese día, los milicianos islamistas mataron a 1199 personas en el sur de Israel, en su mayoría civiles, según datos oficiales israelíes. También secuestraron a 251 personas, de las cuales 103 continúan cautivas en Gaza, incluidas 33 que los militares israelíes declararon muertas.
En respuesta, Israel lanzó una vasta ofensiva que ya ha dejado 40.602 muertos en Gaza, según el Ministerio de Salud del gobierno de Hamas.
La guerra sumió a los 2,4 millones de habitantes de Gaza en una situación humanitaria catastrófica. Los países mediadores entre Israel y Hamas -Qatar, Egipto y Estados Unidos- tratan de lograr una tregua y la liberación de los rehenes a cambio de palestinos presos en Israel.
Agencias AFP y Reuters