Israel intensifica los ataques en Líbano y Gaza, causando más 37 muertos
La situación en Medio Oriente se ha intensificado tras dos ataques israelíes que han causado decenas de víctimas mortales en Líbano y la Franja de Gaza. El Ministerio de Salud libanés confirmó que al menos 20 personas perdieron la vida en un ataque aéreo israelí en la localidad de Aalmat, situada al norte de Beirut, en una zona alejada de la presencia significativa del grupo Hezbolá.
Simultáneamente, en la Franja de Gaza, otro ataque israelí contra una vivienda que albergaba a personas desplazadas provocó al menos 17 víctimas mortales, incluyendo nueve mujeres. El Dr. Fadel Naim, director del Hospital Al-Ahly en Ciudad de Gaza, advirtió que el número de fallecidos podría aumentar mientras continúan las labores de rescate en el campamento de refugiados de Jabaliya.
Crisis humanitaria sin precedentes
La situación humanitaria en el norte de Gaza ha alcanzado niveles críticos. El área de Jabaliya y las poblaciones cercanas de Beit Lahiya y Beit Hanoun permanecen prácticamente aisladas, con un acceso extremadamente limitado a la ayuda humanitaria. Los expertos en seguridad alimentaria han alertado sobre una hambruna inminente en la región, que podría estar ya manifestándose.
La administración Biden ha establecido un ultimátum a Israel para incrementar la asistencia humanitaria en Gaza, advirtiendo sobre posibles restricciones al financiamiento militar estadounidense. Mientras tanto, Qatar, mediador clave en el conflicto, ha suspendido sus esfuerzos diplomáticos hasta que las partes demuestren una voluntad genuina de poner fin a la guerra.
La ofensiva israelí ha provocado el desplazamiento del 90% de la población de Gaza, aproximadamente 2,3 millones de personas. Las operaciones militares han dejado extensas áreas en ruinas en un conflicto que ya se ha cobrado más de 43.000 vidas.
Los intentos de negociación para un alto al fuego, mediados por Estados Unidos, Qatar y Egipto, continúan estancados desde principios de año, incluso con una campaña de vacunación infantil que tuvo que pararse, prolongando el sufrimiento de la población civil en medio de una crisis humanitaria sin precedentes en la región.