Israel difunde escalofriantes hallazgos en la escena de la masacre: las instrucciones de Hamas y el llamado de un terrorista

El papel que encontraron las Fuerzas israelíes en el cuerpo de un militante de Hamas
El papel que encontraron las Fuerzas israelíes en el cuerpo de un militante de Hamas - Créditos: @captura

JERUSALEN.- Pasaron ya más de dos semanas del sábado 7 de octubre, cuando el grupo terrorista Hamas lanzó un brutal ataque sorpresa desde la Franja de Gaza que se convirtió en el peor atentado terrorista de la historia de Israel -1400 muertos, más de 3300 heridos y 220 rehenes- y siguen saliendo detalles de esa masacre.

El gobierno israelí difundió este miércoles la imagen de un trozo de papel hallado junto al cuerpo de uno de los terroristas, escrito a mano, en árabe, en el que, negro sobre blanco, aparecen las instrucciones de esa irrupción salvaje, que marcó un antes y un después en esta región.

¡Sabe que este enemigo tuyo es una enfermedad que no tiene cura, salvo la decapitación y la extracción de corazones e hígados!”, indicó, la oficina de prensa del gobierno israelí, que destacó que esta nota manuscrita confirma que la orden de los comandantes de Hamas era matar a judíos e, incluso, alentaba a degollar a sus víctimas y hasta arrancarles los órganos.

Anoche, confirmando el clima de odio y locura, el gobierno israelí difundió por primera vez durante una sesión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas la grabación de una conversación telefónica entre un terrorista y su familia en Gaza, en la que se oye cómo celebra la masacre recién cometida contra judíos. La grabación fue hallada en un teléfono que pertenecía a una mujer asesinada, que el terrorista utilizó para contarle a su familia lo que consideraba evidentemente una hazaña.

Escuchar la grabación es impactante. El terrorista, evidentemente fuera de sí, llama a su padre y le dice, exaltado, que se encuentra en el kibutz de Mefalsim y le grita que vea en su WhatsApp a todos los judíos que mató. “¡Te hablo desde el teléfono de una mujer judía que maté y también maté a su marido, maté a diez con mis propias manos!”, celebra el terrorista, con una voz totalmente excitada.

Según la prensa israelí, muchos de los terroristas del comando estaban drogados: tenían píldoras de Captagon, considerada la cocaína de los pobres.

“Papá, ¡diez con mis propias manos!”, reitera una y otra vez, orgulloso de su carnicería. “Su sangre está en mis manos, pasame a mamá”, clama. “Te juro, mamá, maté a diez con mis propias manos”, reitera. Su madre lo felicita y aparece un hermano, a quien el terrorista también le cuenta, gritando, la masacre recién realizada. “¡Estoy en Mefalsim, fui el primero (en entrar) con la protección de Allah!”, grita. Cuando un familiar lo conmina a volver, el terrorista, de nombre Mahmud, ostenta fanatismo y determinación: “¿Qué querés decir con volver? No hay vuelta atrás. Es la muerte o la victoria”.

La sesión del Consejo de Seguridad en la que fue reproducido el audio no estuvo exenta de polémica. Allí, el ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Eli Cohen, le recriminó al secretario general de la ONU, António Guterres, sus comentarios sobre el feroz asalto de Hamas. “Señor secretario general, ¿en qué mundo vive usted? Sin duda, no es el nuestro”, le dijo el funcionario israelí, mientras mostraba fotografías de los ataques de Hamas contra civiles. Más tarde, el embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, exigió la renuncia de Guterres.

En un discurso previo, Guterres había condenado las “violaciones claras del derecho humanitario” en Gaza y expresado: “Es importante reconocer que los ataques de Hamas no ocurrieron en un vacío. El pueblo palestino ha estado sometido a 56 años de ocupación asfixiante”.