Las islas Comoras acuden a las urnas con el actual presidente en busca del cuarto mandato

Nairobi, 13 ene (EFE).- Unos 340.000 ciudadanos de las islas Comoras, situadas en el sureste de la costa africana y en el océano Índico, están llamados este domingo a votar en unas elecciones presidenciales en las que el actual jefe de Estado, Azali Assoumani, busca su cuarto mandato y tercero consecutivo.

En total, seis candidatos concurren a la Presidencia en una jornada en la que los comorenses también elegirán en 868 colegios electorales a los gobernadores de las tres islas que componen el archipiélago africano: Gran Comora, Mohéli y Anjouan.

En un país que ha vivido una veintena de golpes de Estado -tanto exitosos como fallidos- desde su independencia de Francia en 1975, las elecciones se celebrarán con una oposición que no ha logrado superar la división para formar un bloque unido y que ha criticado la falta de credibilidad y transparencia del proceso electoral.

En un comunicado difundido esta semana, sin embargo, la Comisión Electoral Nacional Independiente (CENI), que los opositores han tildado de favorable al poder, afirmó que los comicios serían "creíbles, transparentes y conformes con la ley".

En busca de la reelección

Assoumani, excoronel de 65 años y originario de la isla principal, Gran Comora, busca seguir al frente del país otros cinco años, después de haber gobernado democráticamente entre 2002 y 2006 y desde 2016 hasta la actualidad.

Pero el mandatario, que se presenta al frente del partido Convención para la Renovación de Comoras (CRC), ya dirigió el país antes, tras liderar el golpe de Estado que derrocó en 1999 al entonces presidente, Tadjidine Ben Said Massounde.

Estos son los sextos comicios presidenciales que se celebran en el pequeño estado insular, con un población total de más de 850.000 personas, después de la firma en 2001 de los acuerdos de Fomboni, que pusieron fin a la crisis separatista e iniciaron un sistema de gobierno rotatorio entre las islas.

Según esos pactos, plasmados en la Constitución de 2001, la Presidencia debía rotar entre las tres islas principales tras cada mandato, con el objetivo de dar estabilidad al país.

Sin embargo, en julio de 2018 se aprobó en un referéndum una modificación de la Constitución que autoriza la reelección del presidente, lo que permitió a Assoumani volver a presentarse en los comicios anticipados de ese mismo año -que ganó en primera vuelta con el 60,77 % de los votos- y concurrir en la votación de mañana.

La oposición ha criticado con dureza esta reforma constitucional y reclama modificar de nuevo la carta magna o redactar una nueva.

Rivales

Entre los rivales de Assoumani en la carrera presidencial, se encuentran el expresidente de la Asamblea Nacional, Bourhane Hamidou, al frente del movimiento Woneha; y el exministro del Interior Salim Issa Abdillah, al frente del principal partido de la oposición, Juwa, y candidato de la coalición Nalawe.

Concurren también Daoudou Abdallah Mohamed, del partido Naranja; Aboudou Soefo, del movimiento Tsasi; y el exgobernador Mouigni Baraka Saïd Soilihi, de la Agrupación Democrática de Comoras por la Igualdad.

En líneas generales, los candidatos opositores critican la alta tasa de desempleo, el elevado coste de vida y la falta de accesibilidad a la educación.

La oposición exige, además, la liberación de quienes considera presos políticos, como el popular expresidente Ahmed Abdallah Sambi (2006-2011), miembro de Juwa y condenado en noviembre de 2022 a cadena perpetua por traición en relación a delitos de corrupción tras cuatro años de prisión preventiva y un juicio tildado de injusto.

Parte de la oposición ha llamado incluso al boicot de los comicios, al considerar que el proceso electoral no es transparente.

Inestabilidad económica y educativa

La población acude a las urnas preocupada por la inflación, la falta de empleo juvenil y el acceso a la enseñanza pública, entre otros problemas.

El pasado 4 de enero los profesores de la educación pública pusieron fin a una huelga de mes y medio por los bajos salarios, un tema que ha estado en el centro de la campaña electoral.

"Esperamos que nos encuentre una solución a esta vida abriendo empresas. Estamos hartos de estar sentados sin hacer nada (...) Acabaremos convirtiéndonos en delincuentes", declaró un joven comorense a medios locales en un mitin del candidato Bourhane.

Si ningún candidato alcanza la mayoría el 50 % de los votos está prevista una segunda vuelta para el próximo 25 de febrero.

(c) Agencia EFE