¿Por qué los mosquitos pican más a unas personas que a otras? “Es una pregunta compleja, pero cada vez tenemos más pistas para responderla”, adelanta Romina Barrozo, investigadora del laboratorio de Neuroetología de Insectos del Conicet.

En las últimas semanas hubo una “invasión” de estos insectos en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Las fuertes lluvias y las temperaturas cálidas generaron un verdadero caldo de cultivo para la proliferación de mosquitos silvestres como el Aedes albifasciatus, la especie que hoy invade la ciudad, también conocido como “austral” o “de las pampas”. Frente a esta situación, muchos se preguntan cuál es el motivo por el que algunas personas son picadas más que otras.

“Hay factores fisiológicos y genéticos que nos hacen diferentes y hacen que produzcamos un perfil de olores distinto al de otras personas. Los olores que emanamos del cuerpo, como el dióxido de carbono, son atrayentes para los mosquitos. Además, las personas pueden tener diferente PH [es una variable química que permite medir el grado de acidez de una sustancia] en la piel, o en la tasa metabólica, todas estas diferencia fisiológicas pueden ser factores determinantes”, indica Barrozo.

Otro punto, señala la especialista, del que se habla en la comunidad científica que estudia los mosquitos, es el atractivo que genera la microbiota de la piel de algunas personas.

Cierre de la línea D: los usuarios temen por un colapso de colectivos y demoras para llegar a sus trabajos

“En la piel, convivimos con bacterias que producen distintos metabolitos secundarios que son volátiles y que son atractivos para los mosquitos. Se ha visto que en personas con una alta abundancia de bacterias, pero baja diversidad, encontramos que son más susceptibles de ser picados”, describe Barrozo.

Victoria Micieli, investigadora del Centro de Estudios Parasitológicos y de Vectores del Conicet y la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), agrega que el dióxido de carbono, la temperatura corporal y las sustancias volátiles que se emanan de la piel, en parte producto de la transpiración, son algunos de los factores que atraen a los mosquitos. Uno de los compuestos que más atracción genera es el ácido láctico, resalta.

“Esto se modifica según la especie de mosquito. Hay algunos que pican a las aves, entonces los atrayentes van a variar y también tendrá que ver con los hábitos de alimentación de cada especie”, aclara Micieli.

Repelentes

Arnaldo Macia, investigador de la división de Entomología del Museo de La Plata y de la UNLP, describe que para protegerse, los repelentes, al ser sustancias que interfieren en el olfato de los mosquitos, “tapan” los olores que les gustan.

“El más eficiente que se encontró hasta ahora se llama DEET (dietil toluamida) que es el componente principal de los repelentes en aerosol más vendidos. Pero también hay otras sustancias que repelen bastante bien, algunas mejores que otras, como la citronela, picaridina, aceite de limón y eucalipto, piretro de los espirales. A su vez, varias sustancias aromáticas pueden actuar como repelentes. Se mezclan con aceites o agua para rociar o humedecer la piel, como limón o lavanda, pero están muy lejos de ser tan eficiente como el DEET. No sirven otros métodos como comer ajo en cantidad, ni ingerir mucha vitamina B12. No sirven los dispositivos electrónicos que emiten ultrasonido. Las pulseras impregnadas funcionan bien siempre que tengan DEET. Mientras que los cosméticos pueden aumentar la atractividad a los mosquitos o repelerlos dependiendo de qué producto se trate”, afirma Macia.

¿Qué enfermedades puede transmitir?

Además de las molestias que generan las picaduras, con el albifasciatus el problema central es la Encefalitis Equina del Oeste, una enfermedad vinculada a los caballos, que puede contagiarse al humano a través de este insecto y que, principalmente, se propaga en áreas rurales.

A partir de la detección viral en caballos, el mes pasado el Ministerio de Salud de la Nación activó una alerta epidemiológica en todo el país. La intención es poder localizar, a través de vigilancia, posibles casos en humanos. Hasta ahora, según informó la cartera sanitaria, son 12 los pacientes confirmados, uno de los que falleció. Seis corresponden a la provincia de Santa Fe, donde murió un hombre de 66 años con comorbilidades, se indicó.

El mosquito que hoy predomina en la ciudad, al no ser el Aedes aegypti, no transmite el dengue. De todas formas, los especialistas señalan que hoy se debe insistir más que nunca en la prevención contra esta infección, ya que los informes epidemiológicos de la ciudad muestran un leve aumento de los casos en las últimas semanas.

Precauciones hogareñas

Debido a la curva epidemiológica ascendente, en la última semana, el Ministerio de Salud de la Nación pidió extremar las medidas de prevención y los cuidados para evitar una mayor propagación del mosquito Aedes aegypti. Eso incluye el descacharrado en las viviendas, el uso de repelente, de acuerdo con la edad y la forma de uso indicada; vestir ropa clara que cubra brazos y piernas, sobre todo durante actividades al aire libre; colocar en los ambientes espirales, tabletas o aerosoles, según las indicaciones de cada producto; colocar mosquiteros en puertas y ventanas; y proteger con tules camas, cunas y cochecitos de bebés.

Los síntomas más comunes de la infección suelen ser fiebre, cansancio y malestar general, náuseas y vómitos, erupción en la piel, diarrea, dolor detrás de los ojos, dolor muscular, articular o corporal para poder moverse.

Dado que hay una proporción de población que ya pudo estar expuesta a una primera infección por el virus del dengue, de contraer una segunda infección por otro serotipo viral, aumenta el riesgo de desarrollar una forma grave de la enfermedad (hemorrágica, como se la conocía antes). En estos casos, hay que tener en cuenta también como síntomas la menstruación fuera de tiempo en las mujeres, el sangrado de encías o por nariz, o la aparición de sangre en materia fecal o al orinar.

En colonias de vacaciones

Según informó la Ciudad, más de 20.000 chicos comenzaron a disfrutar de las Colonias Deportivas de Verano. Es por eso que para combatir la proliferación de mosquitos en las sedes donde se desarrollan las actividades se diseñó un programa de desinsectación especial para estos predios.

“El operativo diagramado por el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana, junto con la Secretaría de Deportes, abarca las 14 sedes de colonias y los trabajos se desarrollan una hora antes del ingreso de los niños y luego del egreso, a partir de las 16. Estos trabajos se complementan con aquellos que se están realizando en parques, plazas, y afines, los cuales están activos durante todo el año (incluyendo los días hábiles y feriados, de lunes a domingo); pero que se vieron intensificados por el contexto actual”, indicaron fuentes del Ministerio.