Inspirados en el terror, personalizan máscaras

CIUDAD DE MÉXICO, octubre 27 (EL UNIVERSAL).- Entre moldes, pinturas, pinceles y creatividad, los hermanos Cisneros: Óscar, Aldo y José, en colaboración con Adrián Ramírez, crearon un espacio donde realizan un proyecto dedicado a la fabricación de máscaras. Inspirados por el terror de festividades como Día de Muertos y Halloween, el taller es conocido como Moebius Horror Shop y se ubica en la avenida Texcoco, en el municipio de Nezahualcóyotl, en el Estado de México.

La idea surgió hace 18 años cuando iniciaron con el negocio comprando máscaras para después revenderlas; sin embargo, hace apenas 10 años los hermanos decidieron trabajar formalmente en el taller y fabricarlas ellos mismos.

"Todo empezó como un juego, decíamos: vamos a hacer máscaras, y ahora, estamos a punto de arrancar con una fábrica que busca ser una fuente de empleo para las y los jóvenes del municipio", comentaron los hermanos Cisneros a EL UNIVERSAL.

Moebius Horror Shop trabaja con materiales como látex y moldes para realizar caretas y máscaras y su tiempo de producción depende del tamaño, el diseño y los detalles que necesite el modelo.

Para la temporada de 2024 esperan una producción aproximada de 500 máscaras, realizando entre 20 y 40 máscaras al día. Además, esta fábrica mexiquense cuenta con un catálogo base que incluye modelos que han creado ellos mismos, con nuevos conceptos o criaturas. Este año agregaron tres nuevos diseños.

Durante todo el año crean las máscaras, aunque durante octubre y noviembre es cuando se intensifica su labor, pues las películas de terror suelen lanzarse durante esos meses: "Por mercadotecnia se estrenan en octubre para Halloween, es ahí donde vemos qué personajes valdrán la pena para fabricar modelos de máscaras", explicaron.

Su dedicación y constancia los han llevado a enviar sus creaciones artísticas a diversos puntos del mundo como Estados Unidos, Reino Unido, Japón e Italia desde hace seis años. Incluso, en una ocasión, vendieron una máscara a la Embajada de Japón en Australia.

La venta de las máscaras la realizan por menudeo y mayoreo. Sus precios para mayoristas oscilan entre los 100 y los 350 pesos, dependiendo del diseño y respecto a menudeo, el precio es el doble.

Al ser una fábrica familiar y mexicana cuentan con distintos tipos de clientes como: el mayorista, aquel que revenderá los diseños y realiza su pedido desde agosto; el cliente fiel, que cada año los visita y adquiere un modelo diferente, y el cliente de oportunidad que apenas descubre la marca.

"Cuando se acerca la temporada fuerte, el clima y el ambiente se siente diferente. Es un orgullo, me llena de felicidad que la gente nos voltee a ver y reconozca y valore nuestro trabajo", finalizaron.