Los independentistas de Nueva Caledonia llaman a la calma y piden una solución políltica

París, 22 may (EFE).- La principal organización independentista de Nueva Caledonia hizo este miércoles un llamamiento a la calma en el territorio y pidió una solución política negociada con vistas a una eventual independencia para lograr "un retorno a la normalidad" a largo plazo.

El Frente de Liberación Nacional Canaco y Socialista (FNLKS) reiteró en un comunicado "su llamamiento a la calma entre las personas movilizadas" para que la población, especialmente la más frágil, pueda reanudar su vida cotidiana "en confianza y seguridad".

Pero también advirtió al Estado francés sobre "los métodos de intervención" de las fuerzas policiales y aseguró que no tolerarán "ningún exceso ni desbordamiento" en caso de que actuaran "fuera del marco legal".

El presidente, Emmanuel Macron, llegará durante la noche de París (mañana del jueves en el Pacífico) a la capital, Numea, para tratar de restaurar el diálogo político, y el FNLKS valora el desplazamiento como "una primera respuesta" que permita "reanudar un diálogo tranquilo y sereno"

"Esta crisis solo puede tener una respuesta política" a través de un acuerdo que ponga en marcha "una última etapa de programación del acceso a la independencia", señaló.

El FLNKS, una alianza de distintas organizaciones independentistas cuyos miembros son mayoritariamente nativos de ese territorio autónomo francés del Pacífico Sur, considera que, sin ese acuerdo, las operaciones de restablecimiento del orden público "no supondrán el retorno a la normalidad a largo plazo".

Dentro de esta solución política pidió la congelación de la reforma constitucional francesa sobre el censo electoral de Nueva Caledonia, que los independentistas rechazan porque temen que diluya el peso de los nativos (aproximadamente el 40 % de la población).

Esta alianza advirtió también de que vigilará para que se aclaren "las condiciones en las que jóvenes canacos fueron asesinados cobardemente".

Los disturbios de Nueva Caledonia, han causado hasta ahora seis muertos, dos gendarmes y cuatro civiles.

Las víctimas civiles murieron en diversos tiroteos relacionados con barricadas o intentos de robo, en un territorio que cuenta con unas 100.000 armas para 270.000 habitantes debido a la fuerte afición a la caza.

El FNLKS insistió en que la resolución judicial de las muertes de algunos de los revoltosos "es una condición previa para el restablecimiento de la paz civil de la que el Estado no podrá liberarse".

(c) Agencia EFE