Hombre de Miami gastó $4.4 millones en préstamos por el COVID en autos de lujo

El gobierno federal distribuyó cientos de miles de millones de dólares en préstamos de emergencia para empresas durante la pandemia del COVID-19, incluso regalando pequeñas fortunas a personas que no cumplían los requisitos para obtenerlas, admiten las autoridades.

Por ejemplo, Andre Lorquet: según los fiscales federales, Lorquet se hizo pasar por un preparador de impuestos certificado y afirmó falsamente que un puñado de empresas estaban en dificultades durante la pandemia. El hombre de 38 años de Miami terminó gastando los millones que recibió del gobierno en autos deportivos, desde un par de Teslas hasta un Lamborghini, según una nueva acusación.

Lorquet es la más reciente persona entre las docenas acusadas en el sur de la Florida por estafa durante la pandemia, dijeron fiscales del Departamento de Justicia en Miami.

Lorquet solicitó préstamos de asistencia federal por un total de $4.7 millones, llenando formularios falsos del IRS con ingresos falsos, nóminas y otra información a través de su empresa, Miami ENT LLC, entre junio de 2020 y noviembre de 2021, según afirman los fiscales en la acusación. Lorquet recibió casi la totalidad de los montos de los préstamos que pidió, $4.4 millones, todos aprobados por los prestamistas y garantizados por la Administración de Pequeñas Empresas (SBA) bajo el programa de asistencia masiva por la pandemia.

Pero en lugar de gastar el dinero de forma correcta en nóminas y otros gastos generales, los fiscales dicen que Lorquet compró autos de lujo, entre ellos un Tesla Plaid, un Tesla Model S, un Lamborghini Urus y un Porsche Panamera GTS.

La acusación, que le imputa un plan para “enriquecerse injustamente”, acusa a Lorquet de cuatro cargos de fraude electrónico, cuatro cargos de lavado de dinero y un cargo de robo de identidad con agravantes. Si lo declaran culpable, enfrenta una pena de hasta 22 años de prisión.

Lorquet compareció por primera vez ante el tribunal federal de Miami el martes, según los fiscales del Departamento de Justicia. Su caso figuraba en el portal digital del tribunal, pero no aparecía ningún abogado defensor en su caso.

Los fiscales dijeron en un comunicado de prensa que Lorquet obtuvo “fraudulentamente” los préstamos de asistencia por el COVID-19 bajo el Programa de Protección de Nómina (PPP) de la SBA, el Programa de Asistencia en Desastres por Daños Económicos y la Subvención para Operadores de Locales Cerrados. En virtud de estos programas, si las empresas usaban los préstamos para fines legítimos, como los gastos de nómina y de arrendamiento, se les condonaban.

Pero ese no fue el caso de las solicitudes de Lorquet, según Investigaciones de Seguridad Nacional.

Los programas de asistencia a empresas por el COVID-19 han estado tan plagados de fraudes que el Departamento de Justicia de Estados Unidos designó al sur de la Florida y a otras dos regiones del país para que tomaran la delantera en la lucha contra el problema a nivel nacional.

Después de perder miles de millones de dólares en fondos de asistencia para la pandemia debido a reclamaciones falsas, el gobierno federal comenzó en septiembre a desplegar equipos de investigación en el sur de la Florida, California y Maryland para perseguir a las organizaciones delictivas sospechosas de robar a los programas públicos que ofrecían préstamos a las pequeñas empresas, así como al seguro de desempleo.

Los equipos de la fuerza de combate federal fueron seleccionados en estos estados no solo porque han experimentado un importante fraude con la asistencia durante la pandemia, sino también porque cuentan con los recursos necesarios para ayudar a combatir el creciente problema en todo el país.

El número de procesamientos y pérdidas ha sido asombroso en los últimos dos años.

Hasta la fecha, funcionarios del Departamento de Justicia afirman que los fiscales han presentado cargos penales contra más de 1,500 acusados en todo el país y que las pérdidas de fondos de ayuda superan los $1,100 millones, mientras que las incautaciones superan los $1,200 millones. Además, los fiscales han iniciado investigaciones civiles contra más de 1,800 personas y entidades que solicitaron préstamos de ayuda por la pandemia por un total de más de $6,000 millones.

Al ser la capital del fraude número 1 del país, el sur de la Florida ha liderado la ola de delitos financieros que siguió a la aprobación de la Ley CARES, según los fiscales federales.

El Departamento de Justicia en el sur de la Florida ha encausado más de 80 casos de asistencia para el COVID-19, en su mayoría relacionados con el programa de Protección de Nóminas, lo que la convierte en el líder del país en este tipo de procesamientos. Esos esquemas representan solicitudes de préstamos por un total de unos $250 millones, con solicitantes como Lorquet recibiendo fondos mal habidos, dijeron los fiscales.

En el sur de la Florida, los casos penales incluyen un hombre de negocios que usó el dinero del PPP para comprar un Lamborghini de $318,000, un enfermero que mintió sobre su negocio para obtener $474,000 que se usaron en parte para pagar el alquiler de un Mercedes-Benz y la manutención de sus hijos, y una pareja de los suburbios del norte de Miami que afirmó que eran agricultores para tener derecho a $1 millón en beneficios de asistencia.

David Ovalle, redactor del Miami Herald, contribuyó a este artículo.