Yahoo Noticias “¿Qué es eso?” hombre en kayak en el mar se lleva tremenda sorpresa
Un hombre que pedaleaba en un kayak transparente cerca de la costa oeste de Australia se llevó una gran sorpresa cuando vio a una serpiente que nadaba hacia él.
Brodie Moss, la cara del portal de internet YSB Youngbloods, compartió un video en su página de las redes sociales donde mostraba el encuentro con la serpiente el 7 de febrero.
“¡Miren esto!”, dijo en el video. “¿Qué es eso?”.
La serpiente nadó por debajo del kayak, asombrando a Moss.
“¡Mi madre! ¡Una serpiente marina!”, exclamó.
Moss estaba en el “mar abierto”, de modo que la sorpresa fue muy grande cuando lo que parecía ser una serpiente apareció ante sus ojos.
La serpiente marina oliva es oriunda de las aguas de Australia, y a menudo se encuentra nadando junto a peces en los arrecifes de coral. Las serpientes son comunes en estos arrecife, y son sumamente curiosas, acercándose a los buzos y a los kayaks para investigar a los inesperados visitantes.
La serpientes marinas necesitan aire, pero en el caso de la serpiente marina oliva se sabe que puede aguantar la respiración durante dos horas. Estas serpientes son mayormente nocturnas y se esconden en agujeros en el arrecife durante el día cuando no están cazando pequeños peces o curioseando a grupos de buzos.
Pero pueden ser peligrosas.
Nombradas por el color de su piel, las serpientes marinas oliva son venenosas. Si bien no tienen fama de atacar a las personas, su mordida puede resultar fatal.
Algunas serpientes marinas olivas pueden alcanzar hasta siete pies y nadar hasta profundidades de 230 pies debajo de la superficie del mar.
En el video de Moss, la serpiente marina oliva se ve en la superficie del agua, posiblemente descansando antes de volver a sumergirse a las profundidades.
Las reacciones que provocó el video demostraron tanto sorpresas como temores.
“Se ha desatado un nuevo temor”, escribió un usuario.
“Desde luego si estuviera en el agua tal vez no podría evitar tropezarme con una de estas serpientes”, colgó otro. Otros pensaron que parecía más inocente, o más australiana.
“Pensé que era un plátano que flotaba en el océano”, colgó un visitante.
“Creí que era un boomerang”, bromeó otro.
