Histórico hallazgo: investigadores argentinos encontraron más de 500 objetos de 3500 años de antigüedad en Egipto
Un equipo de investigadores del CONICET lleva adelante el estudio de la tumba de Amenmose en Luxor, Egipto, construida en el 1.500 a.C, así como también tareas de mantenimiento y conservación, ya que resulta un lugar de interés para arqueólogos e historiadores. Este año se llevó adelante la cuarta campaña, en la que lograron abrir la entrada original y recuperaron más de 500 objetos de gran valor para la investigación que se lleva adelante.
Amenmose fue un noble que vivió entre el 1400 y el 1450 a.C, considerado un personaje importante del Antiguo Egipto. Tanto es así que el Ministerio de Antigüedades de aquel país apoya los trabajos realizados por los argentinos, entre los que se encuentran investigadores, arqueólogos, historiadores y conservadores del CONICET y de universidades nacionales y extranjeras.
La tumba está ubicada en el Valle de los Nobles, Luxor, donde vivía la población qrnawi hasta el año 2006, pero tuvieron que ser reubicados en otros lados para poder preservar las tumbas.
Esta semana concluyó la cuarta campaña del trabajo en la tumba de Amenmose, donde se lograron muchos de los objetivos propuestos. En primer lugar, poder acceder a la tumba por su entrada original, que contenía siete metros de sedimento que impedían su acceso. “Hoy fue un día trascendental para el proyecto Amenmose: abrimos la entrada original de su tumba”, explicaron a principios de año en la cuenta oficial de Instagram.
Pero lo más importante de este trabajo fue el hallazgo de más de 500 objetos que fueron excavados y alrededor de 130 fueron tratados en el área de conservación por Myriam Hara, Belén Castro, Agustina Andrade, Doris Hernández y María de los Ángeles Suárez (equipo de conservación). Además, se realizaron 40 dibujos sobre los hallazgos y se tomaron más de 10.000 fotografías de la tumba de Amenmose.
Asimismo, desde las redes sociales señalaron: “Se llevan adelante tareas de limpieza y consolidación de las pinturas murales que decoran la tumba, revelando colores e imágenes que permanecían inéditos y contribuyendo a preservar escenas de 3500 años de antigüedad”.
En esta tarea que realizan los argentinos se limpian y estabilizan cada uno de los objetos para su posterior estudio. Entre ellos se encuentran vasijas de cerámica, textiles, conos funerarios, huesos y restos de cuerpos humanos momificados, papiros, fragmentos de sarcófagos de madera, figurines, ushebtis y diferentes especies de vegetales, según informaron.
Además, la arqueóloga del Proyecto Amenmose, Liliana Manzi, aseguró que se encontraron con dos tumbas más en el patio de la tumba de Amenmose, abiertas en la piedra caliza.
En la cuenta oficial de Instagram, donde se muestran fotografías y videos de cómo fue la cuarta campaña de este proyecto, los investigadores quedaron satisfechos con lo logrado. “Cumplimos así el principal objetivo que nos habíamos propuesto y que celebramos con enorme alegría”, señalaron, quienes continúan en esta travesía que todavía cuenta con mucho por descubrirse.
Cabe destacar que toda la información procesada será volcada en una base de datos digital para que se garantice el acceso para su estudio en el futuro.