Henry Martín y su regaño a Brian Rodríguez, la sal en todas las heridas del americanismo

América salió de Ciudad Universitaria con una derrota que caló hondo. Pumas les venció por 2-1 y Henry Martín, el capitán azulcrema, protagonizó un momento de suma tensión con su compañero Brian Rodríguez en los minutos finales del encuentro. El uruguayo fue expulsado luego de una patada sin balón sobre César Chino Huerta. Con el marcador en contra, Martín reclamó furiosamente a Rodríguez por haber perdido la cabeza de esa manera.

Desde luego, el expulsado no se quedó callado y respondió a Martín. La escena estuvo cargada de tensión para el americanismo. Igor Lichnovsky trató de separar a Rodríguez para evitar que la discusión continuara. América no pudo empatar el partido y se fue así con su segunda derrota del campeonato —la otra fue ante Pachuca en febrero—. La precipitada expulsión del charrúa alejó al América de rescatar el punto.

Rodríguez cayó en el juego de Huerta, que antes le había empujado, y dejó a su equipo con diez jugadores en el peor momento posible. La derrota fue dolorosa en todos los frentes: por ser un clásico, por la discusión que generó entre los jugadores americanistas y por el gol que recibieron de Leo Suárez, que hasta el año pasado jugaba en Las Águilas y ahora les festejó de manera elocuente, enfrente de la banca azulcrema. Fue la sal en todas las heridas del americanismo.

Henry Martín habló de su excompañero y su efusiva celebración. "Es futbol, le aplaudimos a Leo. Está haciendo bien las cosas aquí. Nos duele, pero nos duele sobre todo haber perdido". Además, el volante argentino también asistió a Ulises Rivas en el primer gol felino. Dio el partido perfecto. Martín, en su rol de líder, expresó su sentir sobre la discusión con Brian Rodríguez. "Tal vez no era el momento de decirle, de agarrarlo así, pero fue lo que me nació en ese momento. Ya hablé con él, está todo tranquilo, no pasó a más, quedó ahí. Que no se especulen cosas que no son, el equipo está bien”, indicó ante los medios.

El América ha visto así marchitado su torneo. Con 32 puntos, a pesar del gran nivel que han alcanzado, todavía no han asegurado el liderato general. Toluca tiene las mismas unidades. El viernes cerrarán el torneo regular con su visita al Puebla —por su parte, los Diablos Rojos tendrán su último cotejo ante Cruz Azul—. Aunque han tenido grandes exhibiciones durante los últimos meses, este golpe ante Pumas cae cuando peor podía llegar: previo a la Liguilla y, sobre todo, como antesala inmediata del partido del martes que les enfrentará contra Pachuca en las Semifinales de la Concacaf Champions Cup.

Por su parte, Pumas ha tenido en esta victoria un gran argumento para pensar que puede complicarle la vida a quien sea si accede a la Liguilla. Con 26 puntos, marchan novenos de la tabla general, dentro de la zona de Play-In. Matemáticamente, ya es imposible que salgan de ahí, por lo que ahora el gran pendiente es definir a su rival. Su campaña regular se terminará el viernes cuando visiten a Querétaro en La Corregidora.

El torneo ha sido de altas y bajas para ellos. Pero un triunfo ante al América siempre sabe diferente y más en las condiciones en las que se dio: llegaron como víctimas y terminaron por recetar una derrota dolorosa al eterno rival. Cuando Pumas entra en una racha positiva, es muy complicado cortarles la inercia. Así fue el torneo pasado, cuando llegaron hasta Semifinales. Todavía acusan irregularidad, pero en las noches de inspiración, como el sábado pasado, recuerdan a todos que saben ganar y de qué forma.

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