El Heat anda encendido, pero ahora vuelve al escenario donde el sueño se convirtió en pesadilla

El Heat consiguió el martes la quinta victoria consecutiva y la novena en los últimos 11 encuentros y con ello subió desde el 8vo al 5to puesto de la disputada Conferencia Este, jugando un basquetbol de alta escuela.

Para este tercer partido de la dura gira por el Oeste regresaron a la cancha Jimmy Butler y Nikola Jovic tras purgar un juego de suspensión por el altercado en New Orleans.

Su impacto fue inmediato y se reflejó en el triunfo 106-96 ante los Trail Blazer en Portland, en un juego donde Miami tuvo que remontar y que se decidió al final del último cuarto, cuando a falta de 9:30’ había un abrazo a 82 en el marcador.

Butler con 22 puntos, 4, rebotes, 9 asistencias 4 robos y 2 tapones resultó el mejor del Heat, seguido por Terry Rozier con 19 ( en su regreso de la lesión), Duncan Robinson con 17 y Bam Adebayo, quien al igual que Jimmy rozó el doble-doble con 13 y 9 rebotes.

También aportaron Jovic, Caleb Martin y Kevin Love con 8 unidades cada uno, además de Jaime Jáquez Jr. con 7.

Pero sobre todo lo más destacado fue la defensa de Miami a partir del segundo cuarto, cuando apretó el botón rojo y dejó a su rival por debajo de los 100 puntos, en un verdadero partidazo donde un aficionado de Miami en la grada sacó un cartel que rezaba: “Tenemos suficiente”.

Pero el Heat no quiere quedarse ahí y busca cerrar con barrida su viaje por la carretera nada menos que en la casa de los vigentes campeones de la NBA, los Nuggets de Denver.

Será una reedición de la pasada Final de la NBA y tendrá lugar este jueves 1 de marzo (10 p.m. TV: TNT y 710 AM Radio Mambí), sin duda un partido que tiene circulado en rojo en el calendario.

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El quinteto de Denver (39-19) marcha en la tercera plaza en el Oeste y el miércoles aplastó 117-96 a los Kings de Sacramento para extender a cuatro su racha de victorias.

Sin embargo, el Heat llega cargado de optimismo y espera dar un golpe en la mesa de la NBA en el Ball Arena.

Claro que tendrá que buscar el modo de frenar a Nikola Jokic y no descuidar a Jamal Murray, una misión que parece imposible dada la diferencia de estatura y peso de Jokic respecto a Adebayo, pero el jugador que quede libre puede hacerles pagar, al menos eso fue lo que ocurrió en la discusión del título.

El equipo de Miami no sabe si podrá contar con Tyler Herro, aquejado de molestias en la rodilla por una hiperextensión, y que según reveló la resonancia magnética no tuvo daños estructurales.

El escolta está listado “día a día” y solo jugará si está bien.

Herro, quien es el segundo anotador del Heat con 20.8 puntos por juego, solo por detrás de Butler (21.5), se perdió las pasadas Finales de la NBA por una lesión en la mano que requirió cirugía, y tal vez fue una de las causas por las que su equipo no salió campeón.

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Si bien ya se sabe que el Big Three formado por Butler, Adebayo y Herro son el motor de Miami, hay que destacar el trabajo de los jugadores de banco como Martin, Jáquez y Robinson, quienes le han dado un nuevo aire al equipo, además del ascenso de Jovic a la titularidad y el asentamiento de Rozier.

Para el Heat el encuentro ante los Nuggets, en el mismo escenario donde perdieron el Juego 5 por la corona hace ocho meses, tiene un sabor especial y hasta cierto aire de revancha, aunque este sea solo un partido más del calendario.

“Son realmente un buen equipo en casa”, comentó Butler.

“Claro que nos dimos cuenta de lo que nos pasó el año pasado en la final contra ellos. Pero tenemos que dejar pasar eso porque estamos tratando de llegar allí de nuevo, al igual que ellos”.