Guillermo y Harry, otra vez juntos: acompañados por sus seis primos, velaron el féretro de Isabel II

Todos los nietos de Isabel II, cone el príncipe Guillermo en el centro, rodean el féretro de la reina en la vigilia ceremonial reservada para ellos en Westminster Hall
Todos los nietos de Isabel II, cone el príncipe Guillermo en el centro, rodean el féretro de la reina en la vigilia ceremonial reservada para ellos en Westminster Hall - Créditos: @Aaron Chown

LONDRES.- Los príncipes Guillermo y Harry velaron este sábado el féretro de su abuela, la reina Isabel II, con las cabezas inclinadas mientras una fila de dolientes pasaba por delante de la tumba de la difunta monarca.

Los dos hijos del rey Carlos, ataviados con uniformes militares, permanecieron en silencio durante 15 minutos en la vasta sala de Westminster Hall, donde el féretro yace desde el miércoles, envuelto en el estandarte real y con la corona imperial de Estado enjoyada encima.

Guillermo y Harry estuvieron acompañados por sus seis primos, incluidas las princesas Beatriz y Eugenia, que antes rindieron homenaje a la monarca más longeva de Gran Bretaña. La reina murió el 8 de septiembre en su finca de verano en las tierras altas de Escocia, a los 96 años.

El príncipe Harry y la princesa Beatriz durante la vigilia de Isabel II
El príncipe Harry y la princesa Beatriz durante la vigilia de Isabel II - Créditos: @IAN VOGLER

“Fuiste nuestra matriarca, nuestra guía, nuestra mano amorosa en nuestras espaldas conduciéndonos por este mundo”, dijeron las hermanas, hijas del príncipe Andrés. “Nos enseñaste mucho y apreciaremos esas lecciones y recuerdos para siempre. Por ahora, querida abuelita, todo lo que queremos decir es gracias”.

Cientos de miles de personas hacen fila durante horas en una cola que se extiende a lo largo del río Támesis, esperando para pasar junto al féretro y honrar a la reina, un testimonio del afecto que le tenían.

Los otros primos que asistieron a la vigilia de este sábado fueron Peter Phillips y Zara Tindall, hijos de la princesa Ana, y Louise y James, hijos del príncipe Eduardo.

Más temprano, Carlos y su heredero Guillermo estrecharon las manos y saludaron a los simpatizantes en la cola, preguntando a la gente cuánto tiempo llevaban allí y si estaban suficientemente abrigados.

Entre vítores de “hip, hip, hurra” y gritos de “Dios salve al Rey”, Carlos y Guillermo se dirigieron a los dolientes cerca del puente de Lambeth, mientras se acercaban al final de la masiva cola para ver a la difunta en el histórico Westminster Hall.

Agencia Reuters