El ejército de Israel lanzó un ataque aéreo este sábado contra la casa familiar del líder exiliado de Hamas, Ismail Haniyeh. Según medios internacionales, la propiedad se encuentra ubicada en las afueras de la ciudad de Gaza y fue alcanzada por un misil disparado desde un dron en el marco de una operación más extensa, que incluyó ataques en todo el enclave.

De acuerdo con las primeras informaciones, el inmueble de Haniyeh, localizado en el campo de refugiados de Shati -en el extremo norte de la ciudad de Gaza-, fue bombardeado en horas de la mañana. Así lo notificó la oficina de medios dirigida por Hamas en Gaza. Sin embargo, no trascendieron detalles inmediatos sobre daños o víctimas.

En declaraciones a The Associated Press, un alto mando de Hamas, Ghazi Hamad, dijo que la casa estaba siendo utilizada por los dos hijos de Haniyeh, quien está en el exilio desde 2019. También precisó que la propiedad se halla ubicada en un callejón estrecho del campo de refugiados, que a lo largo de generaciones se ha convertido en un barrio superpoblado de la ciudad de Gaza.

Los ataques de Israel no se limitaron a la mencionada vivienda, sino que también afectaron las afueras occidentales de la ciudad y las cercanías del hospital Al-Quds.

Mientras cientos de miles de palestinos permanecen en la ciudad y en todo el norte de Gaza, Israel sostiene que Hamas tiene una amplia infraestructura militar en el territorio, incluida una red de túneles subterráneos, búnkeres y centros de mando. Afirma que sus ataques tienen como objetivo a Hamas y que los militantes ponen en peligro a los civiles al operar entre ellos.

La ciudad ahora está rodeada por fuerzas israelíes, que han instando repetidamente a los civiles a dirigirse al sur para evitar quedar atrapados en los combates.

“La situación humanitaria en Gaza es horrible”

Ante la escasez de alimentos, agua y combustible necesarios para los generadores que alimentan hospitales y otras instalaciones en Gaza, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, instó a un alto el fuego inmediato para permitir la entrada de ayuda.

“La situación humanitaria en Gaza es horrible”, dijo el funcionario el viernes por la noche en una declaración inusualmente contundente. “Toda una población está traumatizada y ningún lugar es seguro”, agregó.

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, estuvo en la región desde el viernes tratando de encontrar formas de aliviar la difícil situación de los civiles atrapados en los combates y se reunió con ministros de Asuntos Exteriores árabes el sábado. Su misión se complica por la insistencia de Israel en que no puede haber un alto el fuego temporal hasta que todos los rehenes retenidos por Hamás sean liberados.

Guterres dijo que no había olvidado la matanza de civiles a manos de militantes de Hamas cuando lanzaron su ataque contra Israel hace casi un mes, pero remarcó que se debe proteger a los civiles y la infraestructura civil. También planteó que los civiles no deben ser utilizados como escudos humanos y pidió a Hamás que libere a los aproximadamente 240 rehenes que tiene.

Con información de AP y Reuters