Guatemala realiza traslado masivo de reos de alta peligrosidad a nueva prisión con más seguridad

CIUDAD GUATEMALA (AP) — Las autoridades de guatemaltecas trasladaron desde varias prisiones a 131 reos considerados de alta peligrosidad a un renovado centro penitenciario equipado con estrictas medidas de seguridad.

El ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, confirmó que los traslados se realizaron entre la noche del sábado y la mañana del domingo. Dijo que, si bien, hubo alguna resistencia por parte de los internos, se pudo completar el traslado tal como estaba previsto. Las autoridades anticipan reubicar a más de 150 internos.

Extorsión, sicariato y secuestro son algunos de los delitos por los que estos reos están detenidos, condenados o en proceso, y por los que desde ahora estarán recluidos en el centro Renovación 1, situado en el sur del país centroamericano.

Las autoridades elaboraron un perfil a cada reo trasladado, y basándose en su peligrosidad, fueron extraídos de por lo menos una docena de centros penitenciarios en distintos puntos del país.

Al ingreso a la nueva prisión, los reclusos tuvieron que tomarse placas de rayos X y escáneres para asegurarse que no lleven objetos ocultos dentro del cuerpo, recibieron un uniforme naranja y zapatos tipo crocs. Y, entre otras medidas, no tendrán acceso a tomas de energía eléctrica.

En entrevista con The Associated Press, Jiménez explicó el domingo que los reos fueron asignados a distintos módulos, según su grado de peligrosidad.

“Cada reo podrá recibir una visita al mes, la cual va a ser controlada por sistemas de vigilancia y cámaras, no se podrá ingresar ningún artículo personal”, dijo Jiménez. Agregó que cada recluso podrá registrar a solo cinco personas como posibles visitantes, y si bien se contará con un teléfono público, cada interno sólo tiene derecho a comunicarse con alguno de los cinco números que registró, esto con el objetivo de ponerle fin a las actividades delictivas.

Los reclusos pasarán 23 horas al día dentro de sus módulos y tendrán una hora para ejercitarse al aire libre, contarán con alimentación adecuada y digna, e instalaciones controladas por la Dirección del Sistema Penitenciario. Jiménez explicó que se pretende mantener a los reos aislados para evitar contacto con el exterior y evitar que continúen con actividades como la extorsión y el secuestro.

El ministro dijo que es la primera vez que se realiza un traslado a gran escala: “El objetivo es mantener segura a la población”, dijo.

Jiménez explicó que la inversión en la prisión fue de casi 600.000 dólares. Además, se tiene previsto que el próximo presupuesto general incluya un incremento en materia de seguridad para la construcción de prisiones similares.

El presidente Bernardo Arévalo recibió la semana pasada de manos de Jiménez, el ministro de Gobernación, el centro renovado que anteriormente se llamaba Infiernito y que era usado para reos de las peligrosas pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha.

“Se acabó el infierno, ahora será de renovación”, dijo el mandatario al recibir la prisión.