Los Guardianes de la Revolución amenazan con medidas "decisivas" ante las protestas en Irán

TEHERÁN.- Los Guardianes de la Revolución de Irán se pronunciaron después de las protestas que ocurren por la suba del precio del combustible y fueron determinantes: la fuerza militar de élite del régimen iraní advirtió que adoptaría medidas "decisivas y revolucionarias" contra cualquier acto de vandalismo, en caso de que las manifestaciones escalen.

A través de un comunicado, el grupo militar celebró a las personas "vigilantes" que se alejaron de los responsables de los disturbios y los "anarquistas". En tanto, también precisaron sobre la necesidad de mantener "la seguridad, la calma, la unidad y la solidaridad", por lo que afirmaron que protegerán la seguridad y la estabilidad junto al resto de organismos de seguridad.

Por su parte, el presidente de Irán, Hassan Rohani, condenó el "vandalismo" ocasionado en las manifestaciones. "Protestar es un derecho legítimo de los ciudadanos, pero el vandalismo es algo completamente diferente", expresó.

Además, el líder supremo iraní, el ayatollah Alí Jamenei, respaldó el aumento en los precios de combustible que originaron las protestas y culpó de "sabotaje" a los opositores del país.

En tanto, el vocero del Ministerio de Exteriores iraní, Abbas Musavi, ha criticado al secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, por su apoyo a los manifestantes. "El digno pueblo de Irán es muy consciente de que estas afirmaciones hipócritas no contienen una simpatía sincera", dijo. Y agregó: "Las acciones de un grupo de anarquistas y saboteadores que son apoyados por los que son como ellos no están en línea con la conducta y comportamiento de la mayoría del pueblo iraní".

"Es interesante que (Pompeo) muestre simpatía con personas que están bajo la presión del terrorismo económico de Estados Unidos. Ha dicho explícitamente que el pueblo de Irán debe permanecer hambriento hasta que se pliegue a 'nuestras demandas'", sostuvo.

Las protestas comenzaron el viernes, después de que el gobierno iraní anunció que el precio de un litro de nafta regular aumentaría a 15.000 riales (12,7 centavos de dólar estadounidense) y que la cuota mensual para cada auto privado quedaría fijada en 60 litros. En caso de que se exceda esa asignación, el valor ascenderá a 30.000 riales por litro.

En este contexto, cientos de personas salieron a las calles en ciudades como Mashhad, en el noreste, en la provincia sudoriental de Kerman y la provincia de Juzestán, rica en petróleo, para pronunciarse contra el aumento.

El director de la Organización de Planificación y Presupuesto iraní, Mohamad Baqer Nobajt, explicó que las ganancias del nuevo aumento se destinarán a subsidios adicionales para 18 millones de familias necesitadas, es decir, en torno a 60 millones de personas. "El gobierno ha hecho sólo dos correcciones de precio (del combustible) en los últimos seis años", justificó, la vez que dijo que "si se raciona el combustible y se ajusta su precio se controla el consumo".

Agencia DPA