Gran Bretaña ha frustrado 13 ataques terroristas desde 2013
LONDRES (AP) — Las fuerzas de seguridad de Gran Bretaña han frustrado 13 ataques terroristas en menos de cuatro años, en su mayoría gracias a información proporcionada por el público, informó el funcionario antiterrorista de mayor antigüedad el lunes.
Mark Rowley, comisionado asistente de la Policía Metropolitana de Londres, señaló que agencias de seguridad y de inteligencia llegan a atender más de 500 investigaciones de manera simultánea.
La amenaza terrorista a Gran Bretaña es clasificada como "intensa" —lo que significa que un ataque es "altamente probable"— en momentos en que las autoridades enfrentan "algunos retos operacionales importantes", dijo Rowley en una entrevista con la prensa local.
Agregó que "se agradece" el éxito militar contra el grupo Estado Islámico en Irak y Siria, aunque por sí solo "no va a erradicar el problema del terrorismo". Al Qaeda y células en el extranjero de ambos grupos continúan siendo una amenaza, indicó, pero "grupos de extrema derecha" también se han convertido en un objetivo de los esfuerzos de la policía en meses recientes.
La cifra de personas que han salido de Gran Bretaña para combatir a lado de grupos islámicos extremistas ha disminuido, aseguró Rowley. Se cree que hasta 800 personas han salido del país para combatir en Siria e Irak. No se sabe exactamente cuántas de ellas han vuelto, aunque algunos expertos consideran que podría ser la mitad y que aproximadamente 50 han muerto.
"La mayor parte (de nuestro trabajo) es de hecho gente que está en este país y que se ha radicalizado", declaró Rowley. "En ocasiones están en contacto con gente en el extranjero y buscan radicalizar a otros en esta nación y potencialmente realizar ataques".
La atención en los radicalizados de extrema derecha surgidos en Gran Bretaña se da tras el asesinato de la legisladora Jo Cox en junio del año pasado, previo al referéndum sobre la salida del Reino Unido del bloque de la Unión Europea.
El ataque terrorista islámico más reciente en el país ocurrió en mayo de 2013, cuando el soldado del ejército británico Lee Rigby fue asesinado por dos conversos al islam que eran conocidos por servicios de seguridad por sus puntos de vista extremistas.