Gobierno sirio confirma cambios "limitados" en libros de enseñanza tras caída de Al Asad

Damasco, 2 ene (EFE).- El ministro de Educación del Gobierno interino sirio, Nazir al Qadri, confirmó este jueves que ha ordenado "limitadas" modificaciones en los libros de enseñanza, tras la caída del régimen de Bachar al Asad, incluidos textos de enseñanza religiosa.

El ministro afirmó que las modificaciones son limitadas y que se crearán "comités especializados para revisar y examinar los planes de estudio de todas las escuelas sirias".

De momento -aclaró- "sólo hemos ordenado la eliminación de todo lo que glorifica al exrégimen, y hemos incluido imágenes de la bandera de la revolución siria (...) en todos los libros escolares".

También "han sido modificadas algunas informaciones incorrectas que el régimen de Al Asad había metido en el plan de estudios de educación islámica, como la explicación incorrecta de algunos versículos del Corán", libro sagrado de los musulmanes, y "hemos adoptado, en todos los niveles educativos, la explicación correcta, tal como aparece en los libros de interpretación", agregó.

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No dio a conocer más detalles sobre la naturaleza de esa interpretación "incorrecta" de algunos versículos del Corán, y si se trata de una versión más estricta de esos versos o simplemente se limitan a una diferente interpretación de la rama chií a la suní del islam.

Al Asad, que pertenece a la rama chií alaui, fue derrocado el pasado 8 de diciembre por una coalición de facciones lideradas por el islamista suní Organismo de Liberación del Levante (HTS, en árabe), antigua filial de Al Qaeda en Siria, y que capitanea el nuevo hombre fuerte de Siria, Ahmed al Sharaa.

Algunos versículos del Corán, en los que se basa la ley islámica o "sharía", tienen diferentes interpretaciones según las distintas ramas y doctrinas, algunas de las cuales son muy estrictas, como las aplicadas en el ultraconservador Arabia Saudí o en Irán, que lideran las ramas suní y chií, respectivamente.

Algunas organizaciones islamistas, como las terroristas Al Qaeda y el Estado Islámico (EI), adoptan interpretaciones aún más estrictas sobre las que fundamentan su ideología salafista radical (de ulemas de tiempos antiguos) y, por consiguiente, sus acciones violentas.

Esa ideología radical violenta ha sido rechazada por países como Egipto y Emiratos Árabes Unidos, entre otros, e incluso por el propio Arabia Saudí, que combatieron durante décadas a organismos extremistas en su territorio.

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El HTS (Hayat Tahrir al Sham) se ha distanciado desde hace seis años de Al Qaeda, y sus dirigentes han lanzado en varias ocasiones mensajes tranquilizadores sobre sus intenciones y su orientación en la nueva Siria, un país que cuenta con minorías cristinas, drusas, asirias y kurdas, entre otras.

Aún así, países como Egipto y Arabia Saudí se están acercando con cautela a la nueva administración de Siria.

El ministro de Exteriores egipcio, Badr Abdelaty, ha mantenido su primera conversación con su homólogo sirio, Asaad al Shaibani, el miércoles, mientras que una delegación siria se encuentra hoy en una visita en Riad, la primera al extranjero desde la caída de Al Asad.

(c) Agencia EFE