El Gobierno exhibe por primera vez a un grupo de opositores presos en Nicaragua
Managua, 30 ago (EFE).- Las autoridades nicaragüenses presentaron este martes por primera vez a un grupo de opositores que se encuentran encarcelados en El Chipote y que son considerados presos políticos por los organismos humanitarios, un día después que sus familiares denunciaran que sufrían desnutrición y adelgazamiento extremo.
Entre los opositores llevados a una audiencia informativa al Complejo Judicial de Managua se encuentran tres líderes opositores que aspiraron a ser candidatos a la Presidencia de Nicaragua en las elecciones pasadas, más dos dirigentes estudiantiles, un dirigente empresarial, un académico, y tres colaboradores de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro.
El magistrado Octavio Ernesto Rothschuh, presidente del Tribunal de Apelaciones de Managua, notificó a los opositores convictos, todos hombres, sobre cómo marcha el proceso judicial, en una audiencia a la que sólo tuvo acceso la prensa oficial y medios ligados al sandinismo, que compartieron en sus plataformas digitales fotografías y videos de los prisioneros.
LÍDERES OPOSITORES, ESTUDIANTES Y EMPRESARIO
Los tres aspirantes a candidatos presidenciales por la oposición, que pretendían retar al presidente Daniel Ortega en los comicios de noviembre pasado y que fueron mostrados por la prensa oficial y las de perfil sandinista, son Juan Sebastián Chamorro, Medado Mairena y Miguel Mora.
También fue exhibido el líder estudiantil Lesther Alemán, de 24 años, que increpó a Ortega durante el inicio de un fallido diálogo nacional en mayo de 2018, donde le pidió su rendición; así como el presidente de la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN), Max Jérez.
Además fue presentado el empresario Michael Healy, quien fue arrestado cuando presidía el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), la principal cúpula patronal de Nicaragua; y el politólogo y coautor de dos libros José Antonio Peraza Collado.
Los otros tres fueron el contador general y el administrador financiero de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, Marcos Fletes y Walter Gómez, respectivamente, y Pedro Vásquez, conductor personal de la directora de esa ONG, Cristiana Chamorro.
Según las imágenes compartidas, algunos de los detenidos lucen delgados y pálidos, especialmente el dirigente campesino Medardo Mairena, el empresario Healy, y dos colaboradores de la Fundación.
LA DENUNCIA DE LOS FAMILIARES
En la víspera, los familiares de los "presos políticos" denunciaron que las autoridades habían reducido de forma drástica las raciones alimenticias en la cárcel El Chipote, "provocando más desnutrición y adelgazamiento extremo" a los opositores encarcelados.
En la cárcel policial "El Chipote", oficialmente conocida como la Dirección de Auxilio Judicial, se encuentran recluidos dirigentes opositores, estudiantiles, campesinos, empresarios, periodistas y profesionales independientes, incluyendo a siete disidentes que aspiraban a competir por la Presidencia en las elecciones generales de noviembre pasado.
Los opositores, detenidos entre mayo y noviembre de 2021, fueron condenados a penas de entre 7 y 13 años de cárcel por delitos considerados como "traición a la patria" o lavado de dinero.
El presidente Ortega los ha tildado de "traidores a la patria", "criminales" e "hijos de perra de los imperialistas yanquis".
En su denuncia, los familiares demandaron de "manera urgente el incremento de las raciones, así como el mejoramiento del valor nutricional en la alimentación" de sus familiares.
El defensor de derechos humanos y exiliado Pablo Cuevas dijo a periodistas que el Gobierno de Ortega muestra a los presos políticos como parte de una "campaña de terror" con el fin de "amedrentar a la ciudadanía nicaragüense".
"La dictadura dio un paso en falso con toda esta arremetida con la libertad religiosa y el secuestro de los sacerdotes y laicos y saben que internacionalmente ha incrementado el cuestionamiento, el desprestigio y la ilegitimidad", comentó, por su lado, la activista nicaragüense exiliada Haydée Castillo.
Según Castillo, las autoridades "buscan lavarse la cara ante la comunidad internacional".
(c) Agencia EFE