Ganar ante los Jets y esperar la ayuda, única fórmula de los Dolphins para avanzar a los playoffs

Durante una temporada de la NFL los jugadores y los entrenadores pronuncian con asiduidad: “controla lo que puedas controlar”, un recordatorio de los objetivos que están buscando.

Y en gran parte del año esa frase toma valor, pero no contará la historia completa de los Dolphins en esta campaña el próximo domingo.

En medio de una racha de cinco derrotas que ha resultado en que Miami pierda el control de un lugar en los playoffs que parecía asegurado hace apenas un mes, los Dolphins (8-8) deben superar a los Jets de New York (7-9) para seguir con vida.

Pero para completar un regreso a la postemporada por primera vez desde 2016, los Dolphins necesitan que Buffalo Bills derrote a los Patriots de New England, un partido que comenzará simultáneamente con el juego del equipo de Miami a la 1 p.m.

New England tiene la misma marca de los Dolphins (8-8), pero tiene la ventaja de desempate por el tercer y último comodín por un un récord divisional superior.

La mayoría de los jugadores y los coaches son conscientes de los escenarios decisivos que están en juego, pero no les preocupa lo que sucederá a unas 1,300 millas de distancia en Orchard Park, Nueva York, incluso si las decenas de miles de personas que asistirán al Hard Rock Stadium estarán monitoreando de cerca el encuentro de los Patriots con posibles reacciones al marcador.

“Absolutamente no”, expresó el entrenador de los Dolphins, Mike McDaniel, cuando se le preguntó si estaría al tanto del partido Bills-Patriots durante el juego de Miami.

“Cualquier enfoque en algo que no puedes controlar no creo que ayude a obtener el resultado deseado”.

Días después de suspender el desafío de la Semana 17 de los Bills contra los Bengals en Cincinnati por el paro cardiaco que sufrió el el lunes el safety de Buffalo, Damar Hamlin, la NFL anunció el jueves que el enfrentamiento no se jugaría y reveló una serie de escenarios para los playoffs de la AFC, que incluyen la posibilidad de un partido de campeonato de la conferencia en un sitio neutral.

Esta configuración le da a los Bills un incentivo para salir con sus titulares contra los Patriots con uno o dos partidos de playoffs en casa aún en juego, lo que funciona a favor de Miami.

Una victoria de Buffalo ante New England y otra de los Chiefs de Kansas City ante los Raiders de Las Vegas significarían que un triunfo de los Dolphins el domingo los colocaría jugando contra los Bills en la ronda de comodines.

Un triunfo de los Bills y un revés de los Chiefs junto con una victoria de Miami colocaría a los Dolphins jugando con Kansas City en el primer fin de semana de la postemporada.

Pero Miami sabe que antes de poder recibir beneficios de su rival de división debe liquidar a los Jets en casa.

Con Tua Tagovailoa descartado por cuarto juego y segundo consecutivo por una conmoción cerebral y el quarterback suplente Teddy Bridgewater lidiando con un dedo meñique dislocado en su mano de lanzar, McDaniel anunció el viernes que el novato Skylar Thompson abrirá en esa posición.

Thompson no es ajeno a ser el centro de atención esta campaña.

Debutó en la NFL en la Semana 5 contra los Jets después de que el protocolo de conmoción cerebral dejara fuera a Bridgewater.

Su primera apertura llegó la semana siguiente contra los Vikings de Minnesota, pero abandonó el juego y no regresó al lesionarse el pulgar en el segundo cuarto.

Volvió a ser convocado en la derrota de la semana pasada ante los Patriots después de que Bridgewater sufriera una lesión en el tercer cuarto.

Las estadísticas frías de Thompson (54.1 por ciento de pases completos, un touchdown y tres intercepciones) cuentan la historia de un quarterback que tuvo sus problemas cuando se le presionó en algunas jugadas.

Pero sus compañeros de equipo y coaches han elogiado su madurez, manejo de la ofensiva y creen que la falta de tiempo en las prácticas del equipo obstaculizaron su rendimiento cuando se le pidió que entrara a jugar.

“Creo que Skylar hace lo mejor que puede como la mayoría de los quarterbacks, especialmente si son jóvenes y están en su primer año en la liga’’, comunicó McDaniel.

“Creo que vimos una muestra de eso contra Minnesota hasta que se lesionó. Está empezando a tener una idea real de cómo es el juego”.

Mientras tanto, los Jets comenzarán con el veterano quarterback Joe Flacco luego de descartar a Mike White por una lesión en las costillas.

El linebacker Jerome Baker reconoció la frustración de no poder controlar por completo si avanzan a los playoffs, pero se refirió a la racha de cinco victorias consecutivas del equipo como un recordatorio de lo que los Dolphins son capaces de hacer en su mejor momento.

“Todo lo que se necesita es ganar’’, proclamó.

El wide receiver Tyreek Hill también dio su punto de vista.

“Todavía hay confianza en este equipo y en toda la organización’’, proclamó Hill.

“Siento que nunca pierdes eso como competidor. Todos los muchachos nunca dejaremos de creer’’.