El G7 se alinea en torno a un planteamiento común de "reducir riesgos, no desvincular" a China

FOTO DE ARCHIVO. El asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, habla durante una rueda de prensa en la Casa Blanca en Washington, EEUU

Por Trevor Hunnicutt y Jeff Mason

HIROSHIMA, Japón (Reuters) - Preocupados por las tensiones con Pekín, los países ricos del Grupo de los Siete (G7) esbozaron el sábado un enfoque común respecto a China, con el que pretenden "reducir riesgos, no desvincular" el compromiso económico con un país considerado la fábrica del mundo.

Los líderes de las principales democracias del mundo, reunidos en la ciudad japonesa de Hiroshima, afirmaron estar dispuestos a establecer relaciones "constructivas y estables" con Pekín, reduciendo al mismo tiempo su dependencia comercial de la segunda economía mundial.

"Nuestros enfoques políticos no están diseñados para perjudicar a China, no buscamos frustrar el progreso económico y el desarrollo de China", afirmaron en un comunicado emitido en la segunda jornada de la cumbre de tres días.

"No estamos desvinculándonos ni replegándonos sobre nosotros mismos. Al mismo tiempo, reconocemos que la resiliencia económica requiere reducir riesgos y diversificación".

Los líderes señalaron que la cooperación con China es necesaria dado su papel en la comunidad internacional y el tamaño de su economía, así como en áreas de interés común como el clima y los esfuerzos de conservación.

Pero afirmaron que tomarían medidas para proteger la tecnología sensible que pudiera amenazar la seguridad nacional, sin limitar indebidamente el comercio y la inversión.

"Actuamos en nuestro interés nacional", afirma el comunicado.

El comunicado también reafirmó la importancia de la paz y la estabilidad a través del estrecho de Taiwán como indispensables para la seguridad y la prosperidad de la comunidad internacional.

El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo a periodistas que la declaración del G7 no debería sorprender a China, ya que las preocupaciones de los miembros del bloque son "bien conocidas" por Pekín.

"Creo que encontrarán que el lenguaje de China es totalmente directo. No es hostil ni gratuito. Es simplemente directo y franco", afirmó, añadiendo que la declaración surgió tras intensas consultas con los socios del G7 en los últimos años.

Sullivan afirmó que Estados Unidos espera que continúe el compromiso económico con China, pero que todavía está estudiando el calendario de las llamadas telefónicas, visitas y reuniones previstas entre varios funcionarios de la administración y sus pares chinos.

Cada país determinará su propio enfoque, añadió.

(Reporte de Trevor Hunnicutt y Jeff Mason, Escrito por Andrea Shalal y Chang-Ran Kim; Editado en Español por Manuel Farías)