Funcionarios, legisladores y alcaldesas promueven a Sheinbaum frente a juventudes morenistas

Como parte del proyecto bautizado como “Relevo generacional”, que encabeza el diputado morenista Miguel Torruco Garza en todas las entidades del país, y en pleno día laboral, funcionarios federales, legisladores y alcaldesas cobijaron a Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la ciudad de México, durante la apertura del capítulo Ciudad de México de ese “seminario político” en el Teatro de la Ciudad.

Jóvenes de todas las alcaldías de la ciudad y diversos estados de la República, delegados y representantes de Morena de las entidades y la capital, coordinadores del proyecto Relevo Generacional y unos mil 200 invitados especiales –según Alejandro Helguera, coordinador de ese proyecto en Guerrero y quien moderó el evento– se encargaron de dar trato de candidata presidencial a la titular del ejecutivo de la capital antes de su entrada y desde el primer minuto. 

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“Presidenta, presidenta”, se aseguraron de corear desde que en el micrófono se escuchó: “Hace su arribo la jefa de gobierno…”. Afuera, se alcanzaba a oír la misma estrofa, seguida por la frase: “es aquí, es ahora, es con la doctora”. Al lado del designado como fundador del Relevo Generacional, el diputado Miguel Torruco Garza, Sheinbaum se dirigió hacia el escenario del Teatro, donde ya la esperaban algunas de las figuras morenistas más jóvenes:

La senadora Citlalli Hernández; la secretaría del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde; la diputada Aleida Alavez Ruiz; el director general del IMSS, Zoé Robledo; el director general del Instituto Mexicano de la Juventud, Guillermo Santiago Rodríguez; el secretario de Seguridad Ciudadana de la capital, Omar García Harfuch; el diputado federal Mauricio Cantú González; la diputada federal Andrea Chávez Treviño, y la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel.

En segunda fila, el presidente de Morena en la Ciudad de México, Sebastián Ramírez; la secretaria de Cultura de la capital, Claudia Curiel de Icaza; el presidente del Poder Judicial de la Ciudad de México, Rafael Guerra; la alcaldesa de Tláhuac, Berenice Hernández Calderón; la alcaldesa de Milpa Alta, Judith Vanegas Tapia; y la secretaria del Trabajo, Previsión Social y Productividad en Veracruz, Dorheny García Cayetano.

Los honores a la bandera, un video del presidente Andrés Manuel López Obrador explicando el proyecto Relevo Generacional y uno más de su presidente fundador, Torruco Garza, fueron la antesala para los mensajes protagónicos del evento: el del propio Torruco y los de Hernández, Santiago Rodríguez, Alcalde y Montiel, donde la transformación, el humanismo mexicano y la continuidad del proyecto del presidente para 2024, y su consolidación para 2030, fueron los temas recurrentes. 

Van por los más jóvenes, desde los 16 

El Relevo Generacional, según Torruco Garza, no solo depende de promover la creación de una conciencia colectiva, o de darle continuidad a un modelo de gobierno con nuevos cuadros políticos. La obligación patriótica de los jóvenes congregados en el Teatro de la Ciudad, dijo, es “responder al llamado de nuestro máximo líder moral”.

En tanto, su obligación como legislador será presentar en los próximos días, ante el pleno de la Cámara de Diputados, una reforma para que los jóvenes puedan votar desde los 16 años de edad.

“De esta manera, que la juventud mexicana pueda votar por la próxima presidenta –remarcó en voz más alta–… o presidente de la República, y de esta forma, involucrar de una manera activa a la juventud que cada día emana con hervor, fortaleza, entusiasmo, y que participen en la vida pública de nuestra patria, y quienes rechacen esta propuesta de ley, estarán en contra de la juventud mexicana. ¡Qué viva el presidente Andrés Manuel López Obrador!”, concluyó Torruco Garza.

La senadora Citlalli Hernández llamó a no caer en las trampas discursivas de la derecha y explicó que los jóvenes de Morena deben ser relevo de las luchas anteriores, pero también de la historia moderna. Habló del sistema que construyó y destruyó la política, de la crisis que –dice– está recomponiéndose, pero también aprovechó para recordar que el secretario de seguridad del expresidente Calderón, que “ensangrentó al país y pactó con el crimen organizado”, hoy enfrenta un juicio. 

Santiago Rodríguez hizo énfasis en la generación de jóvenes que debe continuar con el movimiento morenista en todo el territorio nacional, con el referente que tienen de Chiapas –destacó– en la figura de Zoé Robledo, aseguró que las juventudes no son indiferentes y tienen la obligación de continuar con las luchas de sus antecesores históricos. 

Para convencer a jóvenes, reviven “grandes glorias” pasadas; Sheinbaum, otra vez contra el INE

Las luchas de los estudiantes, los campesinos, las personas desaparecidas, los personajes históricos, como Zapata y Cárdenas, así como los movimientos a los que pertenecieron en su juventud, fueron utilizadas por los oradores para arengar y convencer a los jóvenes de la continuidad del movimiento político de Morena.

Torruco Garza incluso les llamó a ponerse un minuto de pie con aplausos para honrar la memoria de las vidas de lucha de estudiantes masacrados, campesinos y desaparecidos. En su turno, la secretaria del trabajo recordó cómo conoció al diputado desde que compartieron la primera organización de jóvenes y de comités de Morena, y las asambleas de las que estuvieron encargados. 

En las luchas anteriores, dijo haber aprendido a tener los pies en la tierra, ideales y principios, pero también juicio práctico. En ese momento, no tuvo reparo en revelar una de las lecciones de López Obrador –la “metodología”, la llamó– para ganar una elección: todos y todas trabajar en comités de base, dijo, repartir el tríptico Regeneración, que cada uno convenciera a 10, “la metodología organizativa que logró romper esos muros”, aseguró.

Después, presumió la generación de oportunidad de trabajo y estudio, el programa Jóvenes construyendo el futuro, la recuperación del salario mínimo, y reconoció lo que falta respecto a condiciones laborales dignas. 

Antes de empezar su discurso, la secretaria de Bienestar, Ariadna Montiel, saludó a la jefa de gobierno, “con la que hemos librado grandes batallas”, subrayó. También volvió a las luchas pasadas para calificarlas como el eje fundamental que les ha guiado. Dijo que por primera vez, se puede hablar de una beca educativa en la Constitución, y lo relacionó con sus tiempos en la lucha estudiantil en la Universidad Nacional Autónoma de México. 

Después, aprovechó para descalificar la discusión sobre la presencia de la Guardia Nacional en tareas de seguridad como un doble discurso, porque todo depende del líder que tenga y de que éste tenga amor por el pueblo, a diferencia –aseguró– de la represión que vivió el movimiento estudiantil en tiempos de Zedillo. 

Finalmente, Sheinbaum habló del relevo generacional de un movimiento social, y no solo de un partido o gobierno. Explicó de nuevo la cuarta transformación, habló de nuevo del cambio de régimen que se está viviendo, y volvió a las elecciones de 2006, que quedaron grabadas, añadió, como la historia de la traición al pueblo de México, que lo convirtió en lo que vemos hoy, justificó. 

También a ella le tocó participar en movimientos desde joven, aseguró. Cuando tenía 15 años, en el movimiento de los rechazados, en el momento que ella había entrado al CCH Sur. Después, en el universitario, cuando se pretendía transformar la educación en mercancía, dijo. Criticó, como lo ha hecho el presidente reiteradamente, a los gobiernos anteriores que fueron capaces de saquear, reprimir y desaparecer. 

Para cerrar, aprovechó para volver al tema electoral: “Hoy, cuando dicen ‘el INE no se toca’, en realidad lo que se está construyendo es más democracia, porque a nosotros no se nos olvida el fraude electoral del 2006 ni la compra de votos del 2012. Quien ganó la democracia en el 2018 no fue el INE, no fueron los consejeros del Instituto Nacional Electoral ni fue la gracia de Dios; fue el pueblo de México, y fue un hombre que se ganó el corazón de las mexicanas y mexicanos caminando cada municipio de nuestro país”.

Al final, recordó los principios políticos de Morena, destacó las acciones del gobierno de la Ciudad respecto a la beca universal para niños y niñas, y la creación de dos universidades públicas. Terminó destacando el “momento histórico” con las arengas “¡Qué viva la cuarta transformación!” y “¡Qué viva el relevo generacional!”, mientras entre el público surgía de nuevo un “¡Presidenta, presidenta!”

El interés de los jóvenes no fue mucho más allá del evento inaugural. Las mesas del “seminario político” continuarían varias horas más, pero una vez que Sheinbum salió del Teatro de la Ciudad, este ya estaba semivacío cuando comenzó el primer panel –al que se quedaron la diputada Andrea Chávez, Robledo y Harfuch— dirigido a un relevo generacional que abandonaba poco a poco el recinto.