Qué es y cómo funciona el “cerebro” del Subte de Buenos Aires

La red de subte de Buenos Aires funciona las 24 horas del día, los 365 días del año, porque “cuando finaliza el horario de servicio, se procede a realizar las tareas de mantenimiento de la red”, indicaron desde Emova, la sociedad que opera como concesionario. El Puesto Central de Operaciones, “al igual que el cerebro humano, desempeña un papel crucial en el funcionamiento y operatividad” agregaron.

En la misma línea, explicaron que el Puesto Central, más conocido como PCO, cumple un rol fundamental en el control, supervisión y administración del funcionamiento de los subtes de la Ciudad. “Se conformó en el año 2001 con el propósito de centralizar la información y mejorar la operación diaria”, explicaron.

Al mismo tiempo, en el informe explicaron que el “cerebro del Subte” se encuentra ubicado en un punto estratégico de la Ciudad, está dotado con tecnología de avanzada y un equipo de profesionales capacitados para supervisar el funcionamiento de cada una de las líneas. Y precisaron: “Algunas de las tareas que se llevan a cabo son el monitoreo y control de la circulación de las formaciones, la seguridad y la frecuencia del servicio”.

“Desde el PCO se realiza la comunicación con el personal de transporte, material rodante y estaciones, realizando la coordinación necesaria para minimizar y resolver las eventualidades en el servicio que pudiesen surgir, como así también informar al usuario en tiempo real”, añadieron. Asimismo, la concesionaria subrayó que, en forma simultánea, desde el PCO se realizan las comunicaciones con el Puesto Central de Seguridad y con organismos externos con el objetivo de garantizar una rápida respuesta ante imprevistos para asegurar la máxima eficiencia y seguridad en el transporte de pasajeros.

“Cuando finaliza el horario de servicio, se procede a realizar las tareas de mantenimiento de la red. Así, desde el PCO, los operadores de cada línea coordinan las labores de limpieza y obras llevadas adelante durante toda la noche, en túneles, andenes, boleterías y otras dependencias. También se realizan trabajos de mantenimiento de vías, traslado de trenes a los talleres, control de señales, sistemas de ventilación, energía y sistemas de comunicación, entre otras tareas que realiza Emova en todas las instalaciones”, agregaron.

Por último, afirmaron que, “como todo cerebro, el PCO coordina sin descanso los movimientos y las acciones necesarias para brindar servicio a los usuarios que diariamente utilizan el Subte para movilizarse por la Ciudad, de forma rápida y segura”.

Semanas atrás, el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires anunció que a partir de diciembre se sumarán a la tarjeta SUBE nuevos medios de pago para el subte. Los usuarios de la red de Subte de Buenos Aires podrán pagar sus viajes con tarjeta de crédito; tarjeta de débito; o con sus celulares (si tiene tecnología NFC –Near Field Communication) a través de billeteras virtuales y siempre conectados a una tarjeta.

Sin embargo, no se trata del primer cambio del gobierno nacional vinculado al pago del transporte público. Esta semana, se conoció el lanzamiento de la tarjeta SUBE digital para los teléfonos con tecnología NFC. La herramienta surge de la última versión de la app SUBE, con la que ya se podían hacer distintas acciones vinculadas al Sistema Único de Boleto Electrónico. A medida que los usuarios actualicen la plataforma, la aplicación permitirá que cada vez más personas abandonen la tarjeta plástica y utilicen el celular, el cual ya puede apoyarse en el lector del colectivo para abonar los viajes.

“Ahora se podrá pagar el transporte público desde el celular. Tenemos más de 60 puntos de validación en todo el país y más de 27.000 colectivos. La utilidad de pagar con el teléfono ya se ha comprobado en las pruebas piloto. Es un avance hacia un sistema de transporte más moderno”, sostuvo Paula Bibini, presidenta de Nación Servicios, en diálogo con LA NACION.