La fiscalía de Kosovo llama a declarar al primer ministro en una medida controversial

PRISTINA, Kosovo (AP) — La Fiscalía Especial de Kosovo citó el lunes al primer ministro, Albin Kurti, para testificar en un caso que aún no está claro, y sus partidarios afirmaron que la iniciativa tenía motivaciones políticas mientras el país se prepara para las elecciones.

Kurti estaba en un viaje al extranjero y se fijará otra fecha para la citación, dijo Liridona Kozmaqi, portavoz de la fiscalía.

La vocera declinó dar detalles sobre la naturaleza del caso.

Sin embargo, el portavoz de Kurti, Perparim Kryeziu, dijo en una publicación de Facebook la semana pasada que el primer ministro estaba llamado a testificar en un caso bajo el Artículo 414 del Código Penal, que regula los delitos relacionados con el “abuso de cargo oficial o autoridad”.

Kryeziu afirmó que la citación tenía motivaciones políticas y era "un intento de influir en el resultado de las elecciones de 2025".

Kosovo celebrará elecciones parlamentarias el 9 de febrero, una votación que se espera sea una prueba clave para Kurti, cuyo partido de izquierdas Movimiento de Autodeterminación ganó por un amplio margen en 2021.

Los principales contendientes para la próxima elección son el Partido Democrático de Kosovo, cuyos principales líderes están acusados de crímenes de guerra en el tribunal de La Haya, y la Liga Democrática de Kosovo, el partido más antiguo del país y que ha perdido mucho apoyo tras la muerte de su líder Ibrahim Rugova.

Las encuestas locales muestran al partido de Kurti como favorito.

El principal problema en la campaña siguen siendo las estancadas conversaciones de normalización con Serbia, que la Unión Europea ha facilitado desde 2011, aunque con pocos progresos. Las conversaciones son decisivas para la membresía de los dos países en el bloque.

Kosovo era una antigua provincia serbia hasta que una campaña de bombardeos de la OTAN de 78 días en 1999 terminó una guerra entre las fuerzas gubernamentales serbias y los separatistas de etnia albanesa en Kosovo, que dejó unos 13.000 muertos, principalmente de etnia albanesa, y expulsó a las fuerzas serbias. Serbia no reconoce la independencia de Kosovo, proclamada en 2008.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.