Yahoo Noticias De las finanzas a la jaula, este peleador de la UFC es más feliz que nunca con su cambio de vida
Podría decirse que Carlos Vera pelea por su estancia en la UFC.
Sin embargo, su única aspiración es que todos vean al verdadero peleador que vive en su cuerpo cuando este sábado enfrente al congolés Josías Musasa en el Apex Center de Las Vegas.
El ecuatoriano ofreció férreo combate en su debut frente al japonés Rinya Nakamura, pero no pudo llevarse la victoria debido a un campamento de apenas dos semanas y una lesión en un hombro. Ahora afirma estar en perfecto estado físico y mental.
Pase lo que pase, a sus 37 años, Vera es un peleador de la vida. Un hombre que tuvo la valentía para dejar una profesión en la banca tras una carrera universitaria para dedicarse por completo a su pasión verdadera: las artes marciales mixtas y enseñar a las nuevas generaciones.
¿Qué significa esta pelea en el actual momento de tu carrera?
“Cada pelea para mí es importante. Cada pelea es una pelea que uno se prepara al ciento por ciento. Yo no pienso en el futuro tras este combate. Solo me enfoco en esta pelea, en mi contrincante. Estoy entrenando para ganarle a este tipo y eso es todo. Mi primera pelea como amateur fue una pelea superimportante. Para mí esta es igual’’.
Musasa es muy joven y fuerte, ¿cómo le ves?
“El tipo es peligroso, invicto, joven. Tiene todas las cosas que todo el mundo dice, pero a la misma vez yo tengo experiencia. He tenido un campamento entero. Para mi pelea anterior no tuve un campamento, solamente estuve dos semanas de preparación contra Nakamura. Después me lesioné. Ahora no hay excusa’’.
Esta es la pelea, entonces, donde te mostrarás tal como eres.
“Yo creo que sí. Voy al ciento por ciento y verán al verdadero Carlos Vera. En la pelea anterior solo vieron un aspecto de mi juego y fue un aspecto bueno. Me sentí orgulloso porque aunque estuve lesionado pude defender y atacar de una manera que mucha gente no sabe de ese estilo de piso. Nakamura había finalizado a casi todo el mundo. Eso me dio mucha confianza. Saber que yo también sé cómo luchar en el piso. Ahora van a ver un poquito más de mí, un juego más completo’’.
¿Te molesta ver las apuestas tanto en contra tuya, los pronósticos?
“Esos tipos que las hacen no pelean, no entrenan. Si alguien habla de tu familia y no conoce a tu familia, no le vas a prestan atención porque tú conoces a tu familia, tú conoces a tus seres queridos. Me conozco, sé quien soy. Conozco este juego, a mi contrincante. No estoy diciendo que va a ser una pelea fácil. Nunca voy a decir que lo voy a matar. Solamente sé que tengo confianza en mis habilidades y voy a demostrar lo que puedo hacer’’.
Te graduaste de la Universidad, trabajabas en la banca, ¿por qué cambiaste?
“Yo practicaba artes marciales desde los cuatro años. Como comencé tan jovencito, mi estilo de vida siempre fue de entrenar y trabajar, entrenar y trabajar. En la universidad trabajaba y entrenaba. Ya tenía una carrera y seguía entrenando, pero comencé a competir como amateur y me dije bueno, pues tengo mi carrera, cumplí mis metas de ser un hombre preparado y ahora voy a cumplir mis sueños’’.
Y diste el salto.
“Dije que iba a intentar con peleas de amateur y la verdad que me fue muy bien. Perdí unas y después comencé a mejorar más y me dediqué ciento por ciento al entrenamiento, y ya cuando me di cuenta que el nivel iba a subir tuve que cambiar mi estilo de vida. Ya no podía pasar ocho horas detrás de una computadora trabajando, yo necesito estar entrenando esas ocho horas’’.
¿Te arrepientes de cambiar de vida?
“No, amigo, ese es un mundo extraño para mí ya. No pertenezco a nada de ese mundo. Pero aquellas experiencias me han ayudado con la prensa para hablar y presentarme. Porque yo tuve que hacer eso desde joven. Desde los 20, 21 años ya estaba en reuniones, hablando con gente de negocios. No tengo miedo de hablar con nadie, ni estar enfrente de la cámara’’.
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¿Puedes vivir de lo que haces ahora?
“Ahora esta es mi vida, pero luego voy a comenzar a vivir la vida que yo quiero, voy a abrir mi academia, voy a enseñar’’.
Tienes 37 años, ¿qué esperas del futuro?
“Hermano, yo todo lo que he hecho es intentar superarme siempre. Todo está en las manos de Dios. Pero le voy a dar con todo hasta que Dios me abra una puerta o me cierre otra. Voy a seguir hasta que el cuerpo me diga ya no. Y en ese tiempo tengo que tener la humildad de hombre y decir que llegó el momento de enseñarle a la próxima generación’’.
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