Fernández reivindica el papel de América Latina y el Caribe como "acreedores ambientales"

Bruselas, 17 jul (EFE).- El presidente de Argentina, Alberto Fernández, reivindicó este lunes el papel que siempre han desempeñado América Latina y el Caribe como "acreedores ambientales", aunque la región nunca haya sido tratada "como tal".

Fernández pidió a Europa que cumpla el compromiso asumido de proporcionar los recursos financieros necesarios que permitan desarrollar energías limpias y sustentables.

"Europa sabe bien que somos proveedores de oxígeno, que brindan nuestras selvas, nuestros bosques y nuestros montes", dijo el presidente argentino en su intervención en los discursos inaugurales de la cumbre entre la UE y la Celac en Bruselas.

El mandatario argentino se mostró convencido de que la arquitectura de financiación ambiental multilateral debe ser "justa, transparente, equitativa y basada en el principio de responsablilidades comunes, pero diferenciadas".

"La relación entre los países de América Latina, el Caribe y Europa debe basarse en confianza, el diálogo y la cooperación mutua", aseveró y pidió que ambos bloques adopten compromisos que mitiguen las consecuencias de la crisis climática, promoviendo una economía sostenible y respetuosa con el medio ambiente.

Fernández recordó que la pandemia del coronavirus demostró la importancia de la solidaridad entre las naciones latinoamericanas y caribeñas, y puso en valor a la Celac (Comunidad de Estados de América y el Caribe) como mecanismo de diálogo y concertación política, en un contexto en el que las instituciones multilaterales fueron puestas a prueba.

Y en ese marco se promovió el relanzamiento del diálogo con la UE, en noviembre de 2022, cuando se llevó a cabo la reunión de cancilleres de ambos bloques. "Allí elaboramos la hoja de ruta", dijo.

El mandatario señaló que la región está marcada por profundas brechas económicas, donde millones de personas enfrentan la pobreza y la falta de acceso a servicios, la inseguridad energética y alimentaria y un empeoramiento de los principales indicadores sociales.

En el caso de Argentina, destacó que además se sumó el efecto de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), algo que se replica por otros países de la región, que es la "más endeudada del mundo en desarrollo, con un peso promedio de la deuda externa que supera el 77% del PIB integral".

"Sabemos que nuestras sociedades crujen cuando el mercado excluye y el Estado no encuentra mecanismos de integración y participación, y la UE no escapa a esa realidad", señaló.

Por eso celebró que Europa y "la parte del norte desarrollado mire con vocación integradora a la parte del sur que quiere desarrollarse", aunque recordó que una asociación exige que ambas partes "se beneficien en el acuerdo".

"Nuestras regiones deben promover un comercio justo, equitativo y basado en el respeto mutuo. La promoción de inversiones sostenibles y la diversificación de nuestra economías deben impulsar el crecimiento y el desarrollo de nuestras regiones, generando empleo y oportunidades para nuestros ciudadanos", expresó.

VALORES COMPARTIDOS

Fernández reconoció los valores compartidos con Europa, como la promoción de los derechos humanos y las libertades individuales: "La democracia y el Estado de Derecho son aspectos centrales que todos preservamos".

Pero para dar sustento a esos valores "debemos promover políticas inclusivas que garanticen el acceso igualitario a la educación, la salud y al empleo digno".

El mandatario argentino alertó sobre la existencia de "voces que maltratan a las democracias, que encuentran eco en varios sectores de la sociedad".

"Por eso es imperioso -instó- que tejamos entre todos un entramado que restaure la confianza de nuestros ciudadanos en los procesos políticos democráticos, que promueva la transparencia, la rendición de cuentas, y fortalezca nuestras instituciones".

(c) Agencia EFE