La familia de la hondureña Berta Cáceres pide justicia tras siete años de su muerte

Tegucigalpa, 2 mar (EFE).- Familiares y el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh) exigieron este jueves justicia por el asesinato de la ambientalista Berta Cáceres, hace siete años, y que se capture a los autores intelectuales del crimen.

"La testaruda búsqueda de justicia hace que un año más nos encontremos en Honduras y otras partes del mundo, para conmemorar un año más de la siembra de Berta Cáceres como semilla de libertad para el pueblo lenca y hondureño", subraya un comunicado difundido en La Esperanza, oeste del país, donde fue asesinada la ambientalista.

El Copinh y los familiares de la líder indígena reafirmaron su "indeclinable lucha por la justicia para Berta, para que todas las personas involucradas en su crimen sean enjuiciadas y castigadas", añaden Además que exigen que los autores intelectuales del asesinato de la ambientalista "sean llevados a la justicia a pagar por sus crímenes".

Cáceres, quien era coordinadora y cofundadora del Copinh, fue asesinada a tiros en su casa, en La Esperanza, pese a contar con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para protegerla de las constantes amenazas de muerte por su oposición al proyecto hidroeléctrico Agua Zarca.

La ambientalista se oponía a la construcción de Agua Zarca en la comunidad del Río Blanco, de la empresa Desarrollos Energéticos Sociedad Anónima (DESA), por considerar que causaba daños al medioambiente, principalmente a las comunidades de la etnia lenca.

DESMONTAR LA IMPUNIDAD

En el séptimo aniversario del crimen, "reiteramos que la impunidad de los autores intelectuales, que siguen haciendo negocios a costa del pueblo hondureño, es un mensaje que promueve el asesinato de otras personas defensoras de los derechos humanos y el ambiente", señala el comunicado.

El Copinh y la familia de la líder indígena hicieron un llamamiento al Gobierno hondureño a aprovechar "la oportunidad de justicia que Berta Cáceres nos brinda y avancemos con pasos decididos y contundentes para desmontar la impunidad de las mafias criminales que mantienen capturada a Honduras".

La búsqueda de justicia para Cáceres implica el "desmantelamiento del injusto sistema extractivista de los recursos de las comunidades indígenas y campesinas basadas en un modelo de desarrollo" que ha sido "inútil para resolver los problemas de Honduras", señala el comunicado.

"Este sistema de muerte que arrebató a Berta Cáceres de los brazos de sus hijas, hijo, madre y compañeros de lucha, se sostiene por los intereses de inescrupulosos grupos empresariales y bancarios que han desangrado y siguen desangrando al pueblo hondureño por décadas y en especial en el Gobierno de narcodictadura del Partido Nacional", añadió.

En junio de 2022 fue condenado a más de 22 años de prisión el hondureño David Castillo, militar y presidente de la Empresa DESA, como coautor del asesinato de la ambientalista.

Cuatro acusados fueron condenados en noviembre de 2018 a 34 años por el asesinato de Cáceres y a 16 por el intento de asesinato del ambientalista mexicano Gustavo Castro, único testigo y quien era huésped de la líder indígena el día del crimen.

Otros tres fueron sentenciados a 30 años de cárcel, como coautores del hecho sangriento.

Los derechos de las comunidades indígenas se han visto "pisoteados por los intereses económicos de estructuras delincuenciales enmascaradas de desarrollo y empresas verdes", indicó la familia de Cáceres, que pide al Gobierno la cancelación de la concesión del río Gualcarque.

Familiares, organizaciones sociales y representantes diplomáticos recordaron hoy a Berta Cáceres en un acto en La Esperanza, donde se instaló un altar, con un retrato de la ambientalista y ofrendas en su honor.

(c) Agencia EFE